La sexualidad forma parte de la salud integral y es importante en todo ser humano. Diferentes factores pueden generar un desbalance en esta área y desde hace años, los especialistas buscan métodos para mejorar el deseo y la intimidad de las personas. Así surgió el “chip sexual”, pero ¿cómo funciona?
El “chip sexual” o “chip de rejuvenecimiento” es el nombre coloquial que se le da al pallet de testosterona. “Es un pequeño implante biodegradable -es decir, se disuelve lentamente una vez aplicado- que se inserta bajo la piel para administrar testosterona en todo el cuerpo”, mencionó Gustavo Brítez Arbués, especialista en Ginecología y Obstetricia; Endocrinología Ginecológica y Reproductiva en conversación con La Nación/Nación Media.
El pallet se aplica bajo la piel, normalmente en la zona de la cadera, mediante una pequeña incisión y lo que hace el dispositivo es liberar testosterona, una hormona que está presente de forma natural en hombres y mujeres, y que con el paso del tiempo tiende a disminuir su producción. Esta ‘dosis extra’ de testosterona interviene no solo en la función sexual, sino también en los niveles de energía y la masa muscular.
Si bien, todo parece indicar que puede ser una solución para mejorar la vida sexual, el especialista brinda detalles claves sobre este tratamiento. “Está indicado en mujeres que tienen el diagnóstico de trastorno del deseo sexual hipoactivo (HSDD) y esta es la única indicación de acuerdo a las principales sociedades científicas”, señala Brítez y agrega que cuando el tratamiento se administra en las dosis correctas tiene beneficios sobre la función sexual, pero cuando los niveles de testosterona superan los parámetros establecidos, surgen contraindicaciones.
“Muchas veces los pellets elevan la testosterona en el cuerpo a niveles mayores que los fisiológicos, por eso no siempre son adecuados para el manejo de esta condición. El uso de los pellets con este fin es controversial y hay sociedades que no recomiendan su uso”, explicó el profesional.
¿Es peligroso para la salud?
“Hay una serie de condiciones que pueden contraindicar la administración de testosterona por cualquier vía. Las más frecuentes tienen que ver con condiciones oncológicas, cardíacas, hepáticas y renales, entre otras. Es importante consultar con un médico especialista para descartar todas estas contraindicaciones antes de iniciar terapia con testosterona porque esto puede suponer un empeoramiento de condiciones preexistentes o aparición de nuevas patologías”, señaló el especialista.
“El exceso de testosterona tiene una serie de efectos colaterales que pueden aparecer como la alopecia o caída del pelo, acné, el hirsutismo o aparición de vello corporal excesivo siguiendo un patrón masculino, etc.”, agregó sobre los efectos adversos.
Finalmente, Brítez aconseja conversar con un especialista de confianza sobre la falta de deseo sexual o los síntomas que se tengan; de esa manera, el médico podrá realizar los exámenes necesarios para encontrar una solución adecuada. También advierte: “antes de iniciar cualquier tratamiento hormonal hay que tener en cuenta los efectos secundarios que pueden aparecer, por lo que es importante que se consulte con un profesional sobre los riesgos y beneficios del tratamiento”.
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