Podría atribuirse a que las conversaciones del Gobierno Bolivariano y la oposición se realicen en México, la razón por la cual la licencia dictada por la Casa Blanca para que Chevron opere en Venezuela sea tan cantinflérica.
Podría ser. Pues hasta ahora todo indica que “No les quedaba otra”, como se expresan los jóvenes de los barrios caraqueños, que camuflajear con lenguaje rimbombante e hinchado de arrogancia el tener que, finalmente, pagarle al Gobierno Bolivariano el petróleo vendido a Chevron.
Es así , porque enredado en las más de 700 sanciones aplicadas a Venezuela, al gobierno de Joe Biden se le vino encima una realidad geopolítica exigente de cambios tácticos; y conservador al fin la única idea que giraba en los cerebros de asesores era cómo hacer cambios sin que nada cambie. Gatopardianos pues
En su trajinar es probable que les perturbara la pregunta ¿Qué hacer ahora ante una América Latina inclinada a la izquierda, con un Gobierno Bolivariano liderado por un presidente, Nicolás Maduro, consolidado en un país con petróleo suficiente para aliviar la crisis energética responsable de alzas en los precios de la gasolina, los mismos que empujan una inflación roedora de los votos necesarios para reelegir a Joe Biden en 2024?
Nada fácil
Y cuando, al fin, los tanques pensantes medio lograron medio resolver todo este torbellino político, les vino la tarea de ¿cómo desenredar la enredada estopa de sanciones aplicadas a Venezuela y a Pdvsa para que comunicacional y políticamente la Casa Blanca siga apareciendo en su irreductible posición de no permitir que el Gobierno Bolivariano reciba ni un dólar de Chevron?
Después de tanto pensar, cansados, extenuados ya, los estrategas atisban con disimulo una salida: Como Chevron opera aliada con la Corporación Venezolana de Petróleo, CVP, filial de Pdvsa, bajo la figura jurídica de empresas mixtas, entonces puede extraer y venderle petróleo a Chevron, quien le paga a la empresa mixta donde está Chevron, pero no al Gobierno Bolivariano.
Es decir, Chevron le compra petróleo a la empresa mixta en la cual ella participa, y así le paga y otorga ingresos a una operadora donde la CVP, filial de Pdvsa, pero no es, según registro mercantil, propiamente dicho, ni Pdvsa ni Gobierno.
Asi lo dice la Licencia Nro 41 emitida por la Oficina de Control de Activos Extranjeros, Ofac, de la Secretaría del Tesoro de EEUU: “Autoriza la venta, exportación e importación a los Estados Unidos de petróleo o productos derivados del petróleo producidos por las empresas conjuntas de Chevron, siempre que el petróleo y los productos derivados del petróleo producidos por las empresas conjuntas de Chevron se vendan primero a Chevron”.
Y la Chevron en la empresa mixta de la cual forma parte, puede entonces venderle a Chevron, porque se lo permiten las resoluciones del Gobierno Bolivariano que crearon las cuatro empresas mixtas en las cuales la operadora estadounidense participa en Venezuela:
Petropiar, donde tiene 30% y la CVP 70%. Tiene operaciones en el Bloque Ayacucho, de la Faja.
PetroBoscan: Chevron 39,2%, CVP 60% e Inexpro 0,8%. Trabaja en campo Boscán, en el Zulia.
Petroindependencia: CVP 60%, Chevron Carabobo Holdings ApS 34%, el consorcio Japan Carabobo UK Ltd 5% y Suelopetrol International S.A. 1%.
Petroindependiente: Chevron 25,2% mientras CVP 74,8%. Labora en el Lago de Maracaibo donde extrae petróleo 30-40 API.
Como ejemplo, basta citar la resolución que crea Petropiar publicada en Gaceta Oficial donde dice: “PetroPiar podrá desarrollar actividades de mejoramiento de petróleo producida por sí misma, comercializar y vender petróleo crudo mejorado y cualquier otro producto resultante del mejoramiento de petróleo…Asimismo PetroPiar podrá prestar servicios a otras empresas mixtas, a empresas de la exclusiva propiedad del Estado”.
Así las cosas, Chevron no paga al Gobierno Bolivariano ni 30% de regalías ni 50% de Impuesto Sobre la Renta, Islr, pero Chevron en la empresa mixta sí paga 30% de regalías y 50% de Islr.
Tanto así que la Asociación Venezolana de Hidrocarburos (AVH), que agrupa a las empresas transnacionales, se queja que la carga fiscal sobre las empresas mixtas está entre las más altas del mundo: alcanza 91% la tasa del llamado government take o la cantidad total de ingresos que el gobierno recibe de la producción, que incluye impuestos, regalías y participación accionaria.
Deudas mutuas van y vienen
Los pagos de Chevron tanto de regalías como Impuesto Sobre la Renta, Islr, vía las trochas de empresas mixtas, no serán los únicos que deberá realizar la operadora estadounidense en Venezuela.
Hasta ahora no hay cifras de las deudas mutuas entre Pdvsa y la petrolera estadounidense. Ambas tienen pasivos con proveedores venezolanos, impactados en buena parte por causa de las sanciones.
No obstante , una de las deudas que tiene Chevron con Pdvsa es por el denominado Lucro Cesante, así denominado el daño patrimonial causado por la pérdida de una ganancia legítima o de una utilidad económica como consecuencia de un daño, la cual no se habría producido si el evento dañino no se hubiera verificado.
En el caso Chevron, mientras las sanciones aplicadas por el Gobierno de EEUU le impedían extraer y comercializar petróleo, su aliada en las cuatro empresas mixtas, la CVP, sí operaba, hasta donde podía, los pozos.
Es decir, la aliada de Chevron en las mixtas, CVP, perdió una ganancia legítima por los brazos caídos de Chevron en los pozos, que desde el 28 de enero de 2019 dejó de operar debido a las sanciones de su gobierno, la Casa Blanca de EEUU.
Sin embargo , aún cuando los cálculos de las cuantías de deudas de Pdvsa con Chevron y de Chevron con Pdvsa están por precisarse, solo por citar un año, 2021, la mixta PetroPiar produjo 49.000 barriles diarios. Al poseer esta operadora el 70% de la empresa y Chevron 30%, ésta última debió haber producido y no produjo 15.000 barriles diarios.
El precio promedio de la cesta petrolera venezolana en 2021 fue de 49,40 dólares, de manera que la CVP dejó de percibir 270.5 millones de dólares solo en 2021 con PetroPiar. Falta contabilizar 2019, 2020 y 2022. Las cuentas suben al incluirse Petroboscan, Petroindependiente y Petroindependencia durante 2019, 2020, 2021 y 2022.