Proyecto bajaría aporte del ICE a fondo de ahorro, pero aumentaría cotización de empleados

El proyecto de ley, para cerrar regímenes de pensiones especiales en cinco instituciones públicas, modificará al mismo la contribución de los empleados y del patrono al fondo de ahorro del Instituto Costarricense de Electricidad (ICE).

Con una nueva redacción de la iniciativa, dictaminada afirmativamente por la Comisión de Asuntos Sociales de la Asamblea Legislativa, el peso de las contribuciones en esta entidad se voltearía.

De aportar un 4,5% sobre el salario del trabajador sobre un fondo de garantías y ahorros, según la legislación actual, el ICE contribuiría con el 0,5% para sostener el componente de ahorro o los fines que decida la Junta Directiva, excepto jubilaciones y pensiones.

Los trabajadores, por su parte, pasarían de contribuir el 1% de sus remuneraciones actual, a un porcentaje no menor al 4% de sus sueldos.

Solo en el año 2021, con el esquema actual, el ICE debió depositar ¢8.770 millones por contribuciones para estas pensiones. Este régimen colectivo, no de cuenta individualizada, beneficia a 4.600 jubilados y posee 11.300 cotizantes activos.

El cambio en los aportes obedece a que la propuesta de ley derogaría la pensión complementaria, no así el fondo que la creó, el cual tiene otros componentes como el ahorro.

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Dicho de otro modo, la reforma de 1990 a la ley creadora del ICE, le obliga a realizar aportes al fondo especial para el pago de prestaciones laborales, garantías y ahorros para el personal permanente, del cual se derivan recursos para la pensión complementaria especial.

Con el cierre de la pensión, patrono y trabajadores seguirán contribuyendo para el mismo fondo con porcentajes distintos, el cual quedarían funcionando para las otras funciones del fondo general de la institución.

De hecho, la reforma del artículo 17 de la ley del ICE establecería que estos recursos “no podrán ser utilizados para ningún fondo de pensiones y jubilaciones”.

“En efecto, el artículo que crea los fondos, crea al mismo tiempo el fondo de ahorro y el de pensiones especiales. Como el texto versa sobre pensiones complementarias especiales, hay que reformar el artículo en vez de eliminarlo a rajatablas, porque habría dado al traste con un fondo del que no es objeto el proyecto. Por eso se reforma el artículo en lo tocante al fondo de ahorro y garantías personales, eliminando la porción referida al fondo de pensiones complementarias especiales”, explicó Melina Ajoy, diputada del Partido Unidad Social Cristiana (PUSC).

Algo parecido ocurriría con el fondo de retiro que crea la pensión complementaria en la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS), donde el aporte solo viene de la parte patronal.

El artículo 21 de la Ley Constitutiva de la CCSS crea el Fondo de Retiro, Ahorro y Préstamo (FRAP), el cual se conforma por el Fondo de Retiro de los Empleados (FRE), el Fondo de Retiro Laboral (FRELA) y el Fondo de Reserva Institucional para Préstamos (FRIP) para préstamos.

Este último fue creado para realizar préstamos a los trabajadores y cubrir, en caso necesario, cualquier déficit actuarial del FRE o el FRELA. Es decir, es un fondo contingente.

Para sostener todos esos beneficios, la Caja aporta el 3% sobre el salario de cada trabajador y los empleados, por lo que en el caso de la pensión, es una tercera distinta al régimen de Invalidez, Vejez y Muerte (IVM) y al Régimen Obligatorio de Pensiones Complementarias (ROPC), pero regalada.

La iniciativa de ley derogaría el FRE que se nutre con dos terceras partes del aporte de la institución a dichos fondos, es decir, con el 2% sobre el salario del trabajador.

Los otros componentes se quedarían financiando con el 1% del aporte de la institución sobre las remuneraciones de los empleados, de acuerdo con Ajoy.

Del mismo modo que ocurriría con el ICE, la reforma del artículo 21 de la Ley de la CCSS establecería que de los beneficios del nuevo régimen queda exceptuado el fondo de retiro.

El transitorio de la iniciativa establecería que para liquidar el FRE, la Caja contribuirá mensualmente con 1,5% del total pagado en sueldos y salarios, ordinarios y extraordinarios, durante un plazo de 35 años, en el tanto se presente un déficit actuarial en su respectivo fondo.

“El FRE es la pensión especial. Y la CCSS debe elaborar un plan de liquidación para subsanar el déficit”, añadió la legisladora.

En el caso del ICE, el transitorio le obliga a contribuir mensualmente el 3% sobre el total de las remuneraciones ordinarias y extraordinarias, durante un plazo de 5 años, en el tanto se presente un déficit actuarial en su respectivo fondo.

El plan de ley también derogaría los regímenes de pensiones especiales en el Banco Nacional (BN) y el de Costa Rica (BCR), y en el Instituto Costarricense de Turismo (ICT).