Resumen de tres meses de protestas en Irán que encabezan las mujeres tras la muerte de Mahsa Amini

Según la oenegé Iran Human Rights (IHR), con sede en Noruega, al menos 448 personas, entre ellas 60 menores y 29 mujeres, murieron en la represión de las manifestaciones desencadenas tras el fallecimiento de la joven.

Irán disuelve la policía de la moral tras casi tres meses de protestas

La cifra incluye al menos 128 personas que murieron desde el 30 de setiembre en la provincia de Sistán Baluchistán (sureste) tras manifestaciones que no estaban relacionadas con el movimiento desencadenado por el deceso de Mahsa Amini, aunque alimentaron la ira contra el gobierno.

Los Guardianes de la Revolución informaron por su parte que las protestas dejaron más de 300 muertos.

El Consejo Supremo de Seguridad Nacional, máximo órgano de seguridad de Irán, declaró el sábado que el número de personas fallecidas en las protestas "supera las 200".

Mahsa Amini, de 22 años, fallece en el hospital el 16 de setiembre tras estar en coma. Fue detenida tres días antes por la policía de la moral por supuestamente no llevar correctamente el velo.

Amini es inhumada el día siguiente en su ciudad natal de Saqqez, en la provincia de Kurdistán (oeste). Las fuerzas de seguridad dispersan una manifestación con gas lacrimógeno.

Muchas personalidades expresan su indignación en las redes sociales. El 20 de septiembre, un parlamentario iraní, en unas declaraciones poco habituales, critica a "la policía de la moral" y considera que "no consigue ningún resultado, salvo dañar al país".

En los días que siguen, se producen otras concentraciones, también en Teherán y Mashhad. Imágenes en redes sociales muestran a mujeres quemando sus velos.

El 22 de septiembre, las autoridades bloquean el acceso a Instagram y WhatsApp, las dos aplicaciones más utilizadas en Irán.

Estados Unidos, Canadá, Reino Unido y la Unión Europea anuncian sanciones económicas contra la policía de la moral y varios responsables de seguridad.

Miles de personas, siguiendo un llamado de las autoridades, salen a las calles, el 23 de setiembre, para defender el uso del velo.

El día 25 del mismo mes, el presidente ultraconservador, Ebrahim Raisi, pide a las fuerzas de seguridad actuar “con firmeza” contra los manifestantes.

Tres días después, la familia de Amini presenta una demanda contra los “autores de su arresto”.

El 2 de octubre estallan violentos enfrentamientos en Teherán entre estudiantes y fuerzas de seguridad en la universidad de tecnología Sharif, la más importante del país.

Una semana después, numerosas estudiantes de secundaria se manifiestan, quitándose el velo y gritando lemas contra el régimen.

El guía supremo Ali Jamenei acusa a Estados Unidos, Israel y sus "agentes" de fomentar las protestas.

El 10 de octubre, la movilización llega al sector petrolero, con huelgas y concentraciones en varias ciudades.

El 12, abogados se suman a las protestas, bajo el lema de los manifestantes "Mujer, vida, libertad", en Teherán. Se unirán también los comerciantes, obreros, estudiantes y profesores.

Represión del luto

El 26, las fuerzas de seguridad disparan a manifestantes reunidos en la ciudad natal de Amini, según la oenegé Gengaw, con sede en Noruega.

Miles de personas habían acudido a una ceremonia que marcaba el fin del luto tradicional de 40 días.

Un tribunal de Teherán dicta el 13 de noviembre la primera sentencia de muerte contra una persona acusada de participar en los “disturbios”.

El 21 de noviembre, los once jugadores iraníes se abstienen de cantar su himno nacional antes de su primer partido del Mundial de Catar.

Pero los deportistas sí la cantan en los otros dos partidos.

El día 24, la ONU abre una investigación sobre la represión.

El 3 de diciembre, las autoridades anuncian la revisión de la ley de 1983 sobre el velo obligatorio.

En la noche, el fiscal general Mohammad Jafar Montazeri anuncia que “la policía de la moral (...) fue suprimida por los que la crearon”.