Fráncfort, 7 ago (dpa) – La seleccionadora alemana de fútbol femenino, Martina Voss-Tecklenburg, destacó la importancia de igualar las condiciones de juego entre hombres y mujeres, pero no respaldó una equiparación salarial con el fútbol masculino tal como la promueve el canciller germano, Olaf Scholz.
«En eso, tengo que discrepar con el canciller», dijo Voss-Tecklenburg el sábado durante una entrevista con la emisora Bayern 1.
«Dijimos que lo primero que queremos es la igualdad de juego, que queremos tener mejores estructuras, que queremos que se equipare la promoción de talentos y la posibilidad de que todas las chicas puedan jugar al fútbol», destacó la seleccionadora nacional.
La entrenadora, de 54 años, tiene sin embargo una opinión clara sobre las primas.
«Me gustaría que haya una equiparación en las primas. Quizás un poco menos para los hombres y un poco más para las mujeres. Tal vez, que en algún momento por el mismo título, hombres y mujeres también obtengan el mismo dinero. Pero nunca llegaremos a la dimensión del fútbol masculino. Y eso tampoco sería bueno», recalcó.
El equipo de Voss-Tecklenburg acaba de quedarse a las puertas de su noveno título al perder por 2-1 en la prórroga en la final de la Eurocopa contra la anfitriona Inglaterra.
El canciller alemán se reunirá este martes con el presidente y el director deportivo de la Federación Alemana de Fútbol (DFB), Bernd Neuendorf y Oliver Bierhoff, respectivamente. Tratarán, entre otras cosas, la igualdad salarial para jugadores y jugadoras.
Para ese entonces, Voss-Tecklenburg habrá comenzado sus vacaciones en Mallorca, por lo que la invitación a la Cancillería en Berlín extendida por el propio Scholz en el vestuario alemán tras la final de la Eurocopa en Wembley se materializará más adelante.
«De hecho, tengo la sensación de que no se trata solo de palabras sueltas y simbólicas», dijo Voss-Tecklenburg en el programa «Sportstudio» del canal ZDF. «Entonces tenemos que hacer algo al respecto. No solo hablar, sino acompañar las palabras de hechos», subrayó.
Durante la Eurocopa de Inglaterra en julio, Scholz tuiteó bajo el hashtag #equalpay (igualdad salarial), entre otras cosas: «Estamos en 2022. Las mujeres y los hombres deben cobrar lo mismo. Esto también se aplica al deporte, especialmente a las selecciones nacionales».
Las mujeres de la selección alemana recibieron 60.000 euros (61.000 dólares) cada una por el título, mientras que los hombres obtuvieron 400.000 euros (407.000 dólares) el año pasado.
«Es importante que personalidades conocidas den la cara por nosotras», dijo por su parte la portera nacional Merle Frohms durante una aparición conjunta con la seleccionadora el sábado por la noche.
La jugadora del Wolfsburgo, de 27 años, dijo además que esperaba que el fútbol femenino tuviera «mayor visibilidad, más igualdad de oportunidades y más aceptación».
Durante el programa del ZDF, Voss-Tecklenburg también hizo hincapié en la necesidad de introducir un salario básico en la Bundesliga, promocionar más a los talentos y jugar en horarios de mayor audiencia.
Dijo que los talentos del sector femenino tendrían que ser admitidos en los centros de desarrollo juvenil (NLZ) de los grandes clubes, lo que hasta ahora solo se da excepcionalmente.
Según la seleccionadora, su primer planteo sería poder convertir a todas las jugadores de la Bundesliga en profesionales, lo que significaría contar con salarios básicos en la liga. «Pero no la igualdad salarial en la escala de los hombres», recalcó.
En opinión de Voss-Tecklenburg, el 50 por ciento de las jugadoras de la Bundesliga tienen que ejercer algún trabajo para asegurarse el sustento.
El próximo partido internacional de la selección fememina de fútbol es el 7 de octubre contra Francia en la ciudad alemana de Dresde.
En cualquier caso, las subcampeonas de Europa pueden contar con el apoyo de Scholz. Durante la Europa también obtuvieron un fuerte respaldo de la ex jefa de Gobierno alemana, Angeka Merkel.
«Lo que más me gustó fueron los mensajes carismáticos e inteligentes de Angela Merkel. Veía todos los partidos y nos apoyaba, y eso era genial», señaló Voss-Tecklenburg.
