Un vecino de la ciudad de 22 años, oriundo de Senegal, ha sido absuelto de intentar robar en una casa de la calle Salto do Can el pasado 1 de diciembre de 2021. Estaba acusado de entrar por el balcón con la vivienda pero no pudo ser porque un vecino, a requerimiento del titular ante un aviso de la central de alarmas, se presentó en el lugar de los hechos. El testigo llamó a la Policía Nacional para indicar que había visto salir de la casa a un varón de raza negra, 1,80 metros de altura y que portaba una mochila de la que sobresalía un paraguas con el mango de madera.
Los agentes acudieron de inmediato a la calle Jesús Soria, por ser una calle en la que residen muchas personas de raza negra. Allí detuvieron al inculpado porque portaba una mochila de la que salía un paraguas.
La jueza del Penal 2 lo absuelve porque el indicio de la mochila no es suficiente, ya que entiende que es un elemento fácilmente intercambiable: es fácil entregarla a otra persona para dificultar la identificación.
Aunque el testigo manifestó que la parecía que la persona detenida tenía las mismas características físicas que la que él vio en la casa, la togada recuerda que ser de raza negra y 1,80 metros “no podemos considerar que se trate de unos rasgos físicos que por su particularidad excluyan a prácticamente toda la población”. De hecho, la Policía Nacional acudió a Jesús Soria “vive un importante número de personas con esas características”. Y aunque llevaba la misma ropa que la persona que él sorprendió -un chándal de color azul-, la jueza dice que no es una prenda singular y la pueden llevar más personas.
