Raza quemó 740 hectáreas y Chandrexa otras 200 hectáreas quemaron en zonas inaccesibles
Las tardes fueron el principal factor limitante La expansión de los incendios Ayer el estado vivió otro día oscuro: cerca de 1.000 hectáreas en los municipios de Raza, Chandrexa de Keixa, Oilisho, Calvariño y Boboras fueron incendiadas. Las precipitaciones tuvieron un efecto positivo, aunque impidieron la salida de los recursos aéreos.
En Carvalleda de Valdeorras, 440 hectáreas de fuego arden activamente en la parroquia de Casaio. Pero no más humo visible.
A las 22:01 del martes, se produjeron incendios forestales en Kambah (Raza), una zona de difícil acceso. De madrugada las llamas eran visibles desde Verín. Allí, un incendio provocó , quemando 600 hectáreas, pero aún está bajo control.
El incendio se produjo poco después de que se produjera otro incendio en el municipio de Chandrexa de Queixa. El alcalde de Raza, José Ramón Baleal, dijo: "Es una cosa matemática. Una vez que comienzas allí, siempre hay luz aquí.
Según estimaciones rurales, las llamas cubren 740 hectáreas.
En mediodía, al incendio de Chandrexa se le unió el fuego, entrando en el Parque Natural de Oinbernadeiro, que había estado en llamas el mes pasado y permanecía casi completamente ardiendo.
A primera hora de la tarde, el foco se desplazó a A Edreira (Laza), un área de alto valor natural en el municipio: “Es una pena. Horrible. Edreira es todo lo que fue destruido por un incendio”, lamentaron algunos de los brigadistas presentes.
Poco tiempo después, el Medio Rural declaró Situación 2 por su cercanía al núcleo de Taboazas en el distrito de Chandrexa. En este último punto, la situación es más grave ya que los incendios se concentran en Franceros, al que solo se puede acceder por vía aérea.
