La Consellería de Sanidade tiene como objetivo acabar con la hepatitis C como problema de salud pública antes del año 2026, para lo que cuenta desde este miércoles con una Estrategia para su erradicación que gira en torno a cinco ejes, entre los que sobresale el cribado de las personas incluidas en los grupos con mayor riesgo de transmisión, combinado con el cribado de los grupos de edad de mayor prevalencia de este virus.
El titular del departamento sanitario del Gobierno gallego presentó en la mañana de hoy la hoja de ruta para la consecución en un plazo máximo de cuatro años de los objetivos propuestos para esta enfermedad por la Organización Mundial de la Salud (OMS) para el año 2030.
La hoja de ruta consta de cinco ejes: la vigilancia epidemiológica, la prevención primaria y promoción de la salud, la prevención secundaria, el diagnóstico y tratamiento, y la formación e investigación.
Comesaña incidió durante su intervención en el tercero de estos ejes, relacionado con la prevención secundaria, y remarcó la importancia de detectar, de una forma más precoz, las infecciones ya existentes, "a través -dijo- de la búsqueda activa retrospectiva y mediante un cribado poblacional oportunista, dirigido a pacientes infectados que desconocen su situación".
"Sabemos donde buscar, porque tenemos identificados a los grupos de población de alto riesgo", afirmó el responsable sanitario, que indicó que más del 80 % de las personas con infección refieren antecedentes de exposición de riesgo para la transmisión del virus, y el 75 % de los casos se concentra en el intervalo de edad que va de los 40 a los 69 años.
Sanidade trabajará también dentro de los centros penitenciarios, para lo que la Xunta de Galicia suscribió este año un convenio para posibilitar el acceso a la historia clínica electrónica al personal sanitario de las prisiones.
Entre los años 2015 y 2021 la sanidad pública gallega logró la curación con antivirales de acción directa de cerca de 8.500 pacientes, y durante esos años también se implementaron distintas acciones con el objetivo de hacer frente a esta "pandemia silenciosa", como la definió el conselleiro.
Recordó, además, que Galicia implantó el Plan Estratégico para el abordaje de la hepatitis C del Sistema Nacional de Salud en el año 2015, estableciendo la adecuada estrategia terapéutica en el uso de antivirales de acción directa para el tratamiento de esta enfermedad.
También en el año 2018, la comunidad gallega puso en marcha el diagnóstico en un solo paso, que hizo posible la identificación y caracterización retrospectiva de pacientes con infección activa por el virus de la hepatitis C, identificándose algo más de 250 pacientes con infección activa desconocida, como recordó Comesaña.
Según datos de la Fundación Española del Aparato Digestivo (FEAD), en la actualidad, solamente entre el 15 y el 30 por ciento de los pacientes que sufren una infección aguda logran eliminar la hepatitis C por completo de su organismo sin necesidad de tratamiento, mientras que en el 70 % restante, el virus permanece y provoca una infección crónica.
Por ello, destaca la FEAD en un comunicado la importancia de realizar diagnósticos que permitan tratar y erradicar la enfermedad antes de que llegue a estadios más avanzados, especialmente, entre los grupos poblacionales con mayor prevalencia (entre 40 y 70 años).
El día 1 de octubre se celebra el Día Internacional de la hepatitis C.
