Detectaron un nicho poco explotado en su ciudad. A pesar de ser una gran metrópoli argentina, Rosario no contaba con suficientes lugares de alquiler de vestimenta. Para hombre había varios, pero no para mujeres, donde el negocio era incipiente y estaba plagado de prejuicios. Así que ellas decidieron salir a competir. Así que en marzo de 2020, la diseñadora Gina Castellani y la administradora de empresas Julieta Colella comenzaron con Dressavant.
Un símbolo de Villa Devoto que cumplió 50 años y busca expandirse
"Nos propusimos avanzar con un cambio de paradigma, creamos una marca de alquiler de vestidos exclusivos para fiestas. Quisimos sumarnos a la ola del slow fashion, aportando nuestro granito de arena a un concepto mundial de consumo consciente", contó Colella.
"Además identificamos una necesidad que no estaba cubierta. En nuestra ciudad y alrededores la oferta para alquilar vestidos para mujeres era prácticamente nula. Sin embargo, el servicio de alquiler de trajes para hombres sí existía, y estaba instaurado desde hacía más de 20 años. Entonces la pregunta obligada que nos motivó a empezar fue el por qué no estaba la misma oferta para mujeres. Sabíamos que había prejuicios detrás de la idea, así como muchos paradigmas que derribar, pero la convicción que teníamos en el proyecto era más fuerte", agregó.
Pero, el inicio no podía ser peor. Fue justamente en marzo de 2020 cuando se declaró la pandemia de Covid-19 e inició el largo periodo de encierro que impidió la realización de cualquier fiesta.
"El momento de la pandemia fue duro, pero paradójicamente agradezco que se haya dado cuando ya habíamos comenzado, porque si no hubiéramos desistido. Creíamos que era una situación que en unos meses pasaba y seguimos adelante. Pero como teníamos costos fijos que asumir, ideamos lo que llamamos Cápsula Lifestyle de confección de batas y pijamas para la venta. Así sumamos productos para el bienestar personal", recordó.
El éxito, sin embargo, llegó cuando aún quedaban algunas restricciones. "La gente no sabía si le agarraba Covid a la novia, si se suspendía, si en vez de a la noche se hacía de día. Fueron un montón de circunstancias que hicieron que la gente desistiera de comprarse un vestido y lo alquilara. Así nos hicimos conocidas en Rosario y en 50 km a la redonda".
Para fines de 2021 la demanda comenzó a escalar y fue el momento de agrandar el equipo y mudarse a un espacio más grande con un local y el taller en el mismo lugar.
Los secretos de un negocio con alma patagónica
El secreto del éxito reside en varios elementos presentes en la oferta de Dressavant. Desde ya que la crisis económica hace que las personas desistan de comprar prendas que pueden costar alrededor de $100.000 para un único uso, cuando por sólo $10.000 pueden acceder a uno.
Pero además ofrecen alternativas. Además de los productos en stock, algunos diseñados por ellas y otros comprados, que conforman el "alquiler de perchero", sumaron el servicio denominado "alquiler a medida", en el que confeccionan una prensa a medida, lo usa y luego lo devuelve para que el vestido pase a formar parte del stock.
VESTIDOS QUE RINDEN MÁS QUE UN PLAZO FIJO
Otro servicio atractivo para la clientela es el alquiler de vestidos de terceros por una comisión. Las clientas lleva sus prendas a consignación y ganan dinero si es alquilado. "¡Hay vestidos que rindieron más que un plazo fijo!", dice Colella.
El negocio es simple. Un vestido se amortiza entre dos y tres usos y hay vestidos que se alquilan entre 5 y 30 veces. Durante 2022, la empresa alquiló 835 vestidos a un promedio de $ 10.000 a precio de hoy. Hoy cuentan con un stock de más de 250 vestidos.
Hoy trabajan en varios proyectos. "Nos gustaría sumar la metodología de alquiler online, a través del cual, la clienta podrá reservar un vestido por la página web con la posibilidad de venir a medirlo al local. Como proyecto a más largo plazo, nos gustaría poder expandirnos con la apertura de nuevos locales en otras localidades en las cuales identificamos hay demanda insatisfecha", cuenta la emprendedora.