La denuncia se radicó directamente a través del jefe de la Urii comisario mayor Roque Nicolás Báez, quien le asignó custodia policial a la familia. La intimidación se concretó cuando el representante del Ministerio Público se trasladó a la localidad San Roque por cuestiones relacionadas a su tarea.
“Hace bastante que recibo amenazas y hostigamientos”, resaltó el doctor Palisá en relación al accionar de sus funciones, y en relación a la denuncia dijo que ya están trabajando la Justicia y la Policía, donde él no está en la investigación.
En relación al caso, el fiscal dijo que “esta persona sabía perfectamente que era mi esposa, a ella la conocen con su apellido de soltera acá; se acercó a ella y le dijo que nos debíamos cuidar por la causa de Generación Zoe”.
“El día martes 27 de septiembre estaba en San Roque debido a un hecho gravísimo que se vivió en esa localidad, por tareas de investigación”, explicó a Radio Dos.
“Por eso le digo a mi señora, que trabaja en la Defensoría de Pobres y Ausentes de Goya, que no la iba a poder buscar, que vuelva no más ella, y justo ese día ella volvió caminando sola porque queda a tres cuadras de mi casa su oficina”.
Tal vez te interese leer: Generación Zoe | Imputaron por estafas a Leonardo Cositorto y a más de 10 personas
Asimismo, el fiscal contó: “Esta persona le dijo que nos debíamos cuidar por la causa de Generación Zoe, en un primer momento pensó que era alguien del trabajo y no reaccionó”.
Y señaló: “Recién cuando volvió a mi casa cayó en la situación, que nunca vivimos antes; hablamos con el jefe de la Unidad Regional Nº 2, se le designó una custodia permanente y se van a tomar medidas especiales con todas las personas que trabajan en Fiscalía”.
“El ministro de Seguridad también se puso a disposición por cualquier cosa, y la Policía también está actuando rápido para tratar de dar con la persona”, agregó Palisá.
Cabe recordar que por la causa de Generación Zoe permanecen detenidos Javier Sebastián Medina, junto a su hermano Nicolás (29) y su medio hermano, Lucas Camelino (36). Eran las caras visibles de Generación Zoe en Goya. Los investigadores estiman que solo en esta ciudad recaudaron más de 400.000 dólares prometiéndoles a unos 320 ahorristas un retorno de 7 % mensual en dólares.
En definitiva, Generación Zoe no fue otra cosa que una estafa piramidal que se sostuvo mientras ingresaban nuevos incautos inversores. Cuando la entrada de dinero ya no permitió cubrir los pagos, los referentes cerraron las oficinas y desaparecieron con los ahorros de los clientes.
La maniobra fue pergeñada por Leonardo Nelson Cositorto (52), quien desde abril está detenido en una cárcel de Córdoba. El hombre, que se presentaba como coach ontológico, abandonó el país cuando empezaron a surgir los reclamos. Finalmente fue hallado en República Dominicana, adonde ingresó en forma ilegal, lo cual facilitó su traslado al país, en los primeros días de abril.
En Goya, Cositorto negó las estafas y dijo que si le concedían la libertad estaba en condiciones de empezar a devolver el dinero. El líder de la organización, que está acusado de asociación ilícita y estafas, ya solicitó en tres ocasiones la libertad condicional o bien la prisión domiciliaria, pero el juez López Lecube rechazó esas posibilidades.
En esta causa, el magistrado le dictó la prisión preventiva por tiempo indeterminado. Es decir que Cositorto permanecerá en un calabozo hasta que el caso pase a juicio oral.
Fuente: El Litoral
Causa Generación Zoe: mientras Cositorto sigue prófugo, detuvieron a otras cuatro personashttps://t.co/2mJgoeXE71
— misionesonline.net (@misionesonline) February 24, 2022