Asimismo, precisó que, aunque actualmente la producción de dichos alimentos se realice en pequeña escala, la idea es aumentar el monto para asistir a los productores misioneros. Cabe señalar que estos servirán para el ganado porcino y de aves de corral, incluso para los peces.
En cuanto a los motivos que provocaron que la concesión de los silos finalice, el mismo explicó que se relacionan con un procedimiento realizado por la Gendarmería Nacional, vinculado al tráfico de granos. «Se tomó la decisión de dejar sin efecto la concesión y hacernos cargo de nuestros lugares», comentó.
Con respecto a los pasos fronterizos, señaló que ubicar los silos en el municipio de San Antonio, donde las chacras terminan en territorio brasileño, provoca que luego resulte complejo reintroducir la producción a Misiones. De igual manera, aseguró que la mayor producción de maíz se encuentra en el municipio mencionado, que cuenta con la frontera seca con Brasil. «La vereda argentina es la vereda brasileña, generalmente el ritmo de vida de frontera termina siendo así», agregó.
En este sentido, contó que la situación se replica en Bernardo de Irigoyen: «En la vereda del barrio de Iprodha de Irigoyen (Misiones), bajás a la calle hacia Brasil». De este modo, el funcionario consideró que estas realidades no son conocidas a nivel nacional.
Entrega de insecticidas en la zona norte de Misiones
Gervasoni aseguró que, hace un mes, desde el IFAI, combaten contra la hormiga minera, lo cual no se realizaba durante bastante tiempo y propició el descontrol de su crecimiento a nivel provincial. Asimismo, explicó que, aunque sea parte del medio ambiente, a raíz del exceso de su desarrollo presentan problemas. «Antes no comían yerba, ahora lo hacen y es impresionante como destrozan la mandioca», contó.
Por lo tanto, junto al Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA) y del sector del agro, abordaron el estudio para determinar el producto a utilizar para combatir dicha especie. «La hormiga es muy inteligente, si llevan un producto que no reconocen al nido, hay otro ejército que lo saca hacia afuera», continuó. Por ende, dicho producto debe ser delicado, y capaz de disfrazarse entre los olores de su nidada.
De igual manera, Gervasoni indicó que ya comenzaron a entregar el insecticida a las cooperativas y asociaciones, a través de los municipios correspondientes, ya que estas son las que se encuentran en el territorio de cultivo. De este modo, comentó que ya se entregaron 4 mil kilos, de los cuales mil se destinaron a la localidad de Montecarlo, teniendo en cuenta que allí, el laberinto vegetal estaba desapareciendo a raíz del trabajo de las hormigas.
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También, contó que en Comandante Andresito sufrieron una invasión de langostas que, aparentemente, llegaron por una migración desde Brasil y Paraguay. No obstante, también puede tener relación con la langosta tradicional del monte, la cual salió de su hábitat por el mal manejo entre el suelo y el cultivo de yerba, de modo que no cuentan con un alimento natural y recurren a la hoja verde. «Ahí llevamos 2500 litros de insecticida orgánico, en base a jabones de potasio que funcionan muy bien», agregó.
Cabe señalar que, en cuanto al proceso, se encuentran en la segunda pasada del producto, dirigida a las crías de dicha plaga: «Al haber movido el suelo, depositan el huevo, por lo que se da el problema de la reinfestación». Además, el presidente del IFAI aseguró que este año tuvieron problemas con las langostas, hormigas y el rulo, lo cual se relaciona con el cambio climático. Por eso, explicó que «la chicharrita del rulo tiene un depredador natural, que es el aguacil, y por las heladas que duraron hasta noviembre, este salió más tarde, y no tuvo el tiempo para buscar el equilibrio al comerse al rulo».
Las expectativas de la zafra de San Javier para el 2023
Al ser consultado sobre la producción azucarera en San Javier para este 2023, el funcionario indicó que esperan tener una buena cosecha de la caña de azúcar. También, insistió con alcanzar un ron misionero de calidad y contó que los alcoholes son dirigidos hacia la salud pública, como sanitizantes.
Además, afirmó que, a diferencia de las opiniones que instan a exportar el azúcar misionero, la producción seguirá siendo para el consumo provincial. «La caña viene muy bien, la lluvia no es abundante, pero es muy buena, todos los días la tenemos en distintos sectores de la provincia», continuó.
Cabe señalar que, durante esta etapa del año 2022, en Misiones las autoridades se encargaban de combatir los incendios forestales. Al respecto, indicó que en ese contexto los problemas fueron la escasez de agua y la falta de preparación. «Creo que nos descuidamos, las personas entendieron el manejo del fuego, y entendió que la quema es mala», agregó. De igual manera, afirmó que el Gobierno provincial se equipó para este tipo de situaciones, por lo que se movilizan aún ante los primeros focos de incendio.
En esta misma línea, Gervasoni también resaltó la importancia de la lluvia y contó que los arroyos de Misiones están activos, por lo que las familias acuden a ellos para disfrutar del agua.
Novedades sobre la producción de carne de cordero
Con respecto a la producción y comercialización de la carne de cordero, Gervasoni aseguró que hasta marzo subsidiarán dicho producto, teniendo en cuenta que las personas deben habituarse a la misma. «Tenemos un cordero misionero de excelente calidad», consideró.
De este modo, el objetivo es que las personas se acostumbren a consumir dicho tipo de carne, por lo que, en el mercado concentrador de Posadas, se habilitó un local que realiza la venta del cordero. «La carne es sabrosa, nutritiva, y baja en grasa», agregó. También, en cuanto al precio, comentó que no hay mucha diferencia con la carne vacuna, aunque es un poco más premium.
Cabe señalar que la producción se realiza en la zona sur y norte, en lugares como San Vicente, San Antonio y Andresito. «En la diversificación de nuestra chacra, estamos logrando muy buenos productos», contó el funcionario.
Por otro lado, anticipó que a partir de marzo comenzarán a distribuir a los productores los alevines de pacú y de boga, junto con los alimentos y asistencia técnica correspondientes. Lo último tendrá un costo mínimo, pero se relaciona con la formación de los animales. De este modo, aunque los alevines cuesten alrededor de $100, el paquete que se determinará, que no tiene un precio establecido, incluirá el alimento para los pescados, un factor que generalmente representa un problema para los productores.
Asimismo, Gervasoni aseguró, de este producto, Misiones tiene una demanda de 9 mil toneladas por año y la producción misionera satisface un 3% de la misma, por lo que la idea es llegar a los mercados, de modo que repetirán el procedimiento que se está utilizando para habituar el consumo de carne de cordero. «Tiene que ser una política de estado poder instaurar el producto, para que las personas lo pidan», agregó.
En este marco, el funcionario explicó que el bajo porcentaje abarcado tiene que ver con que los criaderos de peces estuvieron paralizados durante 7 años y, junto al Ministerio de Ecología, decidieron retomar la producción. «Siempre hablo de producir lo que comemos, el pescado y la rama de mandioca son sanos, y el excedente se puede vender», afirmó.
En este sentido, comparó la producción con un cajero automático, de modo que si se cultivan 10 plantas, serían alrededor de mil pesos. «Hay que entender que podemos vivir dignamente de lo que hacemos, por eso tiene que haber un estado presente acompañando», afirmó.
Para terminar, señaló que esta época del año, donde el calor incrementa y las lluvias suelen escasear, es el escenario adecuado para que el acompañamiento aumente.
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