Con la parsimonia de la experiencia y después de los muchos caminos por los que lo llevó la música, Iván Noble conversa sin prisa, con la calma y el disfrute de su presente. Después de estrenar su último disco "El arte de comer sin ser comido" en el 2021, este año tuvo la dedicación de llevarlo a rincones federales para esa celebración del encuentro con el público y su música de ayer y de hoy.
"A esta altura lo que más me entusiasma todavía es girar y recorrer todo el país más que grabar", dice con seguridad.
Con más de 30 años en la escena y con un recorrido que es parte de la historia musical popular argentina, Ivá,n hoy reflexiona sobre el camino transitado y lo que queda por andar, sus deseos más allá de la música, su afición por la filosofía, la lectura y la escritura; el choque de las nuevas generaciones y más, en esta charla con Filo.News:
- ¿Cómo te tratan estos días después de girar tu último disco, cómo fue este año para vos ya que estamos pisando diciembre y empiezan a revisarse los balances?
- Toqué mucho durante todo el año y eso siempre es el combustible de los que nos subimos al escenario y es lo que más me gusta hacer, estoy contento. Como el disco lo grabé el año pasado, este fue salir a mostrarlo. Me gusta más tocar que grabar.
- Claramente la forma de hacer música de cuando vos empezaste con los primeros pasos a cómo se hace hoy cambió mucho ¿Cómo te llevás con las nuevas generaciones y lo que generan a nivel de alcance?
- En realidad cambió la forma de consumir y distribuir pero te diría que el oficio es el mismo. Los que hacemos canciones y los que peinamos canas, al fin y al cabo el momento de componer entre los nuevos y nosotros es el mismo: agarrás una birome y un papel y arrancás. Sí es verdad que antes para saber qué pasaba con las canciones que uno hacía había que esperar a tocar en vivo para ver lo que le parecía a la gente cuando salía de los shows.
Igualmente, me parece que cada época tiene su signo, que este tiene el suyo y me alegro por los pibes que tienen un acceso más fácil que lo que era para nosotros hace 30 años. Nos adaptamos hasta donde podemos a eso pero el oficio es el mismo. En mi caso, intento que mis canciones le rocen el corazón a la gente, después, toda la carrera de cuántas views, clicks y cuánto se “spotifeó” es una carrera que ya prefiero no correr, no me importa tanto.
Intento que mis canciones le rocen el corazón a la gente, después, toda la carrera de cuántas views, clicks y cuánto se 'spotifeó' es una carrera que ya prefiero no correr, no me importa tanto".
- Un poco de ese cruce generacional se dio con tu canción con Rusherking y sorprendió...
- Fue una propuesta por un programa que conduce Bebe Contepomi. En principio, la idea era juntar músicos de distintas generaciones y convidarlos a hacer algo juntos y a mí me dijeron de hacer algo con Rusher, al cual yo no conocía pero le pregunté a mi hijo y él sí. Me mostró algunas cosas y encontré una que me gustó mucho: “Otra Noche Más”. Nos comunicamos y fue súper amable y cariñoso desde el minuto cero. Me pidió cantar “Avanti Morocha”, yo le dije que estaba un poco cansado de cantarla, pero era una de las canciones favoritas de sus padres así que ahí medio me chantajeó emocionalmente (risas) y salió ese mashup que estuvo muy bien. Esas cosas son curiosidades y creo que hay que ejercer la curiosidad, sobretodo si tenés buena onda con la persona en cuestión y yo me encontré con él y a los 15 minutos ya me había dado cuenta que nos caímos simpáticos y se podía hacer.
- Tu hijo Benito (17) que es parte de esta generación ¿qué te dice, te recomienda música o te pide a vos? ¿Cómo es ese vínculo?
- Nos alimentamos recíprocamente, las músicas nuevas que conozco la mayoría son Benito. Hace un tiempito me dijo: “hay un disco que a vos te puede gustar pá” y me mostró uno de Billie Eilish que me pareció divino. Hace poco me dijo “te van a gustar las letras de estos” y me mostró a Bardero$, YSY A.
Pero él también empezó a escuchar lo que yo le recomendaba, como por ejemplo le dije “si te gusta el rap, vas a tener que escuchar soul en algún momento o música negra” y de a poco comenzó. Le gustan cosas de Prince, de Michael Jackson, rock de los ‘80 que yo ya no escucho y me sorprendo cuando él lo hace, se da una alimentación mutua.
- De los nuevos artistas ¿a quién escuchás que te haya llamado la atención o que te guste?
- Me parece que todavía hay niños y jóvenes que siguen educándose con el sonido rock. No me pongo a escuchar música nueva por motus propio, me la tienen que recomendar, mostrar. En Mendoza me parece que hay muchos pibes como Alejo y Valentín, Gauchito Club.
- Paralelamente volviste a tocar con los Caballeros ¿van a seguir con toques esporádicos o habría un regreso?
- El año que viene se cumplen 25 años del disco “La Paciencia de la Araña” que es el disco más emblemático de la banda con el que explotó. Estamos terminando de ajustar algunos detalles y muy probablemente celebremos eso con shows y esperamos hacerlos federal.
- ¿Cómo definís a tu presente, la etapa de vida en la que estás?
- A mi presente lo defino sereno, contemplativo y satisfecho. Estudié sociología hasta un momento bastante avanzado de la carrera pero nunca la terminé y estuve todo este año estudiando de forma autodidacta con sociología pero también con filosofía que era otra de mis aficiones e intereses. Estuve investigando y leyendo por mi cuenta, entrando a sitios de estudio y estoy pensando en anotarme quizás el año que viene en la facultad, me gustaría hacerlo.
Siempre me gustó leer la historia del pensamiento y cuando uno llega a cierta edad sospecha que filosofar es aprender a morir o a aprender a vivir, son dos caras de la misma moneda y como uno se va llenando de preguntas, va y visita las grandes preguntas existenciales que se hizo la humanidad y así uno se siente menos solo cuando te das cuenta que las angustias que puede llegar a tener las tuvo un tipo cinco siglos antes de Cristo, es una forma de tratar de entender esta quermes a veces dantesca y a veces maravillosa que es el mundo y la vida.
Además, hace unos años, escribí un libro de relatos “Como el Cangrejo” que fue una especie de bitácora de gira y esa fue mi aproximación a la literatura que me gusta mucho. Además, estoy promediando otra cosa que estoy escribiendo y que ojalá termine siendo un libro.
En este contexto cerrando el 2022 y con un 2023 que lo espera con planes, objetivos y también el festejo con Los Caballeros de la Quema, Ivan Noble vuelve a Niceto este jueves 1 de diciembre para despedir el año con un show donde recorrerá gran parte de su discografía y los clásicos que no pueden faltar. Como dice él mismo para "brindar por lo que viene y se va". Las entradas pueden conseguirse en www.nicetotickets.com.ar