El ministro habló de una caída en los subsidios y de una inflación menor a la proyectada por los economistas.
La suba de tarifas y un llamado al ahorro en el consumo de luz, agua y gas permitiría una disminución del déficit fiscal durante el año próximo. Así lo anunció el ministro de Economía, Sergio Massa, en la presentación del proyecto de ley de Presupuesto de 2023. En el mismo, se establece que el dólar oficial cerrará el mandato de Alberto Fernández en un rango cercano a los $ 270, mientras que la inflación rondará el 60%.
La mayoría de los economistas estiman que la inflación de este año estaría bordeando los tres dígitos. El ministro Massa declinó explicar cómo llegaría a morigerar el alza en el costo de vida durante 2023. Ese fue uno de los principales cuestionamientos de los diputados de la oposición que le hicieron preguntas tras su exposición.
Massa estimó que la invasión rusa a Ucrania perjudicó al país con un impacto de US$ 4.900 millones. Es porque el país tuvo que pagar más caro por las importaciones de gas, que se necesitan en invierno. Aunque el país se benefició por la suba de los commodities agropecuarios (generaron más ingresos que los previstos en derechos de exportación), la suba de los precios energéticos engordó el dinero destinado a traer gas extranjero.
El Presupuesto estima una caída de los subsidios energéticos. El ministro no aportó números, sino porcentajes: en 2022 representarán un 2,3% del PBI, mientras que en 2023 morderán un 1,6% de esa torta. Estimaciones de especialistas calculan que eso implica pasar de los US$ 15.000 millones que se destinarían este año para ese fin a un rango de entre US$ 11.000 millones y US$ 12.000 millones para 2023.
El dólar al tipo de cambio oficial escalará un 76% en los próximos 14 meses, según se desprende de los números presentados. Hoy, la cotización es de $ 153 por cada billete estadounidense, mientras que en diciembre de 2023 alcanzaría los $ 270 ($ 269,9), según el presupuesto.
“La retracción en el verano nuestro (el invierno europeo) será la mayor recesión desde la Segunda Guerra Mundial”, avizoró el ministro. Estima que el país tendrá un crecimiento del 2% de su PBI, mientras que las exportaciones subirán un 7%. La mejora en los despachos externos se explicarían por mayores precios por las “proteínas” (como denominó al complejo agropecuario en su discurso), aunque el diputado Ricardo López Murphy le señaló que el escenario de sequía en el campo puede hacer esa estimación demasiado optimista.
La energía, con la puesta en marcha del gasoducto a Vaca Muerta, el campo, el turismo receptivo, y el blanqueo de la construcción serán alguno de los motores de crecimiento en 2023. Massa le agregó un llamado a licitación de las bandas 5G en telefonía celular, en el que espera una buena recaudación.
La disminución de los adelantos del Banco Central al Tesoro, mayores reservas de dólares por créditos de organismos internacionales, y caída del déficit fueron algunos de los temas que planteó el ministro. Todas metas propias de economistas ortodoxos, a los que el Frente de Todos suele rechazar. Los diputados del oficialismo acompañaron a Massa con algunos aplausos. Aunque hubo algunos chispazos con la oposición (ver aparte), los legisladores de PRO, la UCR, Coalición Cívica y otras fuerzas intercambiaron ideas con el ministro en relativa calma.
Los “millones” de hogares que no se anotaron en el registro de subsidios perderán este beneficio en las boletas de luz y gas. Massa convocó a ahorrar en todos ellos, por el doble efecto de “mayor impacto en el bolsillo de los consumidores y en las cuentas públicas”.
El titular de Economía responsabilizó a las provincias por una “caída del 27% en el acceso a la tarifa social”. Esa modalidad permite a los hogares vulnerables acceder a los servicios a valores muy subsidiados. “El registro sigue abierto para quien considera que necesita ayuda”, detalló, aunque hizo hincapié en la importancia de la “eficiencia en el uso de la energía”.
El Presupuesto descarta la creación de nuevos impuestos, y Massa hasta habló de una caída en la presión tributaria: del 23,95% actual del PBI en 2022 a 23,77% del PBI en 2023.
Algunas de las expectativas volcadas en la “ley de leyes” que llamaron la atención de la oposición son el crecimiento de los recursos tributarios (de un 78%, con una recaudación que pasará de $ 19,5 billones a $ 34,8 billones), y el alza del 85% en las contribuciones de la seguridad social (de $ 4,8 billones a $ 7,4 billones).