Afectada por torbellino: ‘Sonó un estruendo, solo vi que se despegó la cerca y las latas volaban’

“Todo empezó con un apagoncillo, se fue la luz y a los minutos comenzó un viento muy fuerte, sonó un estruendo y fue algo increíble, solo vi donde se despegó la cerca y cayó a la calle, las latas volaban como si fueran papeles y los daños no fueron solo en mi casa, sino casi que en todo el barrio, los escombros quedaron en media calle”.

Lizeth Torres, vecina de San Blas del Carmen, Cartago, fue una de las afectadas por el torbellino que se registró este jueves por la tarde. Debido a la emergencia y de acuerdo con el recuento inicial del Cuerpo de Bomberos, hubo al menos 15 edificaciones afectadas, entre estas viviendas, la Curia Diocesana de Cartago y una soda.

La mujer, quien describió lo sucedido como un caos, contó que estaba con su hija mayor en su morada y luego de lo sucedido la llamaron de la escuela para que fuera por la menor, porque muchos niños tuvieron crisis de nervios.

Agregó que a pesar de los hechos, las latas quedaron a un costado de la casa, por lo que eso le permitirá comenzar las reparaciones; sin embargo, los botaguas quedaron sobre el tendido eléctrico. También dijo que sus gallinas quedaron en media calle y un vecino las recuperó. “No les pasó nada, por dicha”, afirmó.

“Mi suegra tiene toda la vida de vivir aquí y dice que en la vida ella había visto algo como esto, lo bueno es que estamos bien”, destacó Torres.

Soda destechada por torbellino en Cartago Un torbellino en Cartago dejó sin techo a una soda.

Los torbellinos son eventos muy rápidos, ya que duran entre uno y cinco minutos, con velocidades que inician en 40 kilómetros por hora y, en ocasiones, también se mantienen estacionarios. La altura que alcanzan depende de la nube, pero se pueden elevar entre los 500 y 1.000 metros.

Daniel Poleo, del Instituto Meteorológico Nacional (IMN), manifestó que en el Valle Central siempre es probable que se formen torbellinos u otros fenómenos, debido a la inestabilidad atmosférica de la región. Añadió que un hecho se caracteriza por condiciones bastante ventosas.

“Lo importante es que haya un numbis (nube de altura mediana) que tenga caída de granizo y ráfagas dentro de la misma nube cuando comienza a rotar, esta genera un embudo debajo de la nube y el viento fuerte hace que caiga sobre la superficie de la tierra y desteche casas, regularmente”, explicó el meteorólogo.

Por su parte, Rodolfo Novoa Dondi, del Cuerpo de Bomberos, detalló que el despacho inicial que ingresó a sus sistemas fue por cortocircuitos en viviendas y que a su llegada se toparon con el paso del torbellino. “Varias casas, al menos unas 15, tuvieron problemas en techos y en sus acometidas, así como en el cableado eléctrico, que sufrió problemas con el paso del viento del tornado. De momento, las personas afectadas es por un tema emocional, por el susto ante este tipo de incidentes”, aseveró.

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Mario Redondo, alcade de Cartago, expresó en su cuenta de Facebook su solidaridad para con las familias afectadas y aseguró que coordinaron con el Instituto Mixto de Ayuda Social (IMAS) y otras organizaciones para brindar la ayuda a las personas que lo requieran.

En tanto, la Comisión Nacional de Emergencias (CNE) dijo que las casas afectadas aún son habitables, ya que los daños fueron en parte de sus techos.

Luz María Masís, quien vive a la par de la Curia Diocesana de Cartago, contó que ella y su hija andaban haciendo mandados en el centro de Cartago y que cuando regresó se bajó del taxi, vio el cielo muy gris y le dijo a la hija que iba a llover torrencialmente.

“Cuando estábamos en la cocina me quedó viendo por la ventana y le dije: ‘Esto no es agua, vea el viento, se escucha mucho viento, ojalá que llueva porque va a haber un tornado’. Me quedé viendo y al ratito ya se veían las latas, casas destechadas, parecía que estaban quebrando maíz. En 35 años viviendo aquí nunca había visto algo así”, precisó Masís.

Torbellino afecta comunidades en Cartago Casas destechadas en San Blas y el Carmen