El Ayuntamiento de Barcelona ha diseñado una estrategia para posicionar a la ciudad en el continente asiático, reforzar lazos con los países de la región y dibujar las líneas maestras para orientar la política municipal en el futuro. Esa iniciativa que el consistorio califica de "pionera" supone la primera estrategia Barcelona-Asia y tiene el reto de promocionar la ciudad, estrechar lazos o captar inversiones y turismo en la región "económicamente más dinámica del mundo", según ha señalado el gobierno municipal.
La estrategia ha sido diseñada por el Ayuntamiento barcelonés con el apoyo y el asesoramiento de Casa Àsia, el organismo de diplomacia pública encargado de construir puentes con la región. A su vez, han participado Fira de Barcelona, Port de Barcelona, el Barcelona Supercomputing Centre, el Consorcio de la Zona Franca, el Institut Ramon Llull, la Cámara de Comercio de Barcelona y Comité de Desarrollo de Rutas Aéreas, entre otros.
El documento revisa el estado de las relaciones con los países de la región y dibuja las líneas maestras para orientar la política internacional de la capital catalana en la región. "La política internacional del Ayuntamiento no puede dejar de plantear la relación de la ciudad con el continente asiático, que acoge el 60% de la población mundial. Barcelona ha de ser capaz de posicionarse en la región más dinámica del mundo, con un peso geopolítico creciente y una diversidad interna muy alta", ha afirmado la tercera teniente de alcaldía, Laia Bonet.
Promoción económica y cultural
El consistorio recalca que se trata de un "primer paso" para posicionar la ciudad en Asia. La meta es establecer y consolidar relaciones estratégicas en ámbitos clave como la innovación, la promoción económica, el desarrollo sostenible, el intercambio cultural y la promoción de los derechos humanos.
La estrategia asiática de Barcelona pretende hacer hincapié en que la capacidad de la ciudad para penetrar en el continente "puede ser de gran interés para la capacitación digital de la ciudadanía, la transformación del modelo turístico hacia uno más sostenible o la reindustrialización verde de la ciudad". En cuanto a la promoción de la ciudad y captación de inversiones, se seguirán canalizando misiones a diversas ciudades asiáticas, para "consolidar" la relación con urbes con las que ya hay lazos previos (Shenzhen, Shangai, Busan, Seúl o Singapur), pero también para impulsar acciones promocionales en más ciudades del sureste asiático.
Por otro lado, conscientes de que Asia es el centro de producción mundial de mercancías y sus puertos son vitales en las cadenas de suministro globales, Barcelona se marca el objetivo de que el Puerto de Barcelona se consolide como uno de los centros principales de distribución logística y de mercancías que provengan de Asia en dirección al sur de Europa y norte de África.
Nuevos mercados
También el turismo aparece como un gran activo para la capital catalana, que se marca el reto de atraer un turismo de "calidad y sostenible", que ayude además a desestacionalizar la demanda. Además de mercados "consolidados" como Japón, China o Corea del Sur, se potenciará la promoción en la India, Australia, Indonesia, Malasia o Filipinas.
Noticias relacionadasEn una línea similar, respecto al ámbito de ferias y congresos, Barcelona tratará de captar visitantes, patrocinadores y expositores asiáticos, pero también internacionalizar en Asia las ferias y congresos organizados en la ciudad. Tanto para el turismo como la participación en ferias y congresos, el consistorio ve "esencial" desarrollar conexiones aéreas directas, por lo que Asia se convierte así en la principal prioridad geográfica para el desarrollo de rutas directas desde Barcelona, incluso por encima de Estados Unidos o América Latina.
Finalmente, el ayuntamiento destaca la presencia "notable" de comunidades asiáticas en la ciudad, en especial la china, la paquistaní, la filipina y la bengalí. En ese sentido, el objetivo es reforzar la integración de las comunidades asiáticas que viven en Barcelona y aprovechar sus contactos con sus países y ciudades de origen para establecer "mecanismos de colaboración continuados" con la ciudad.