Todos los futbolistas conocen las dos caras del deporte de alto nivel, pero quizá en pocos jugadores esta dualidad se da de forma tan acentuada como en la carrera de Gonzalo Higuaín, que acaba de anunciar su retirada a los 34 años. Lo hizo desde la MLS, un retiro dorado para jugadores respaldados por carreras exitosas en Europa, como es el caso del 'Pipita', pero también con momentos amargos.
Real Madrid: de las dos Ligas al Lyon
Higuaín dio el salto a Europa tras dos temporadas en River Plate, uno de los colosos de Argentina. Le esperaba el rey de Europa, pero en un contexto complicado, que nada tiene que ver, sin ir más lejos, con el actual. Doce millones de euros costó un traspaso orquestado por Ramón Calderón y Pedja Mijatovic, un jugador de carácter, honesto, adecuado para aquel momento concreto en la historia del Madrid. En su primera temporada dejó su primer gran flash, aquel gol al Espanyol en una remontada brutal del Madrid en el Bernabéu. Ganó aquella Liga y la siguiente, pero el equipo se estrellaba en el muro de octavos en Copa de Europa.
Con Pellegrinise fue hasta los 29 goles en la 09-10, y luego Mourinho dejó aquella frase sobre las diferencias entre salir de caza con un perro o un gato que dejaba en muy mal lugar a Benzema. Pero no pudo librarse la losa que a ojos del madridismo puso sobre él aquel error a puerta vacía ante el Lyon, que propició otro KO blanco en octavos de la Champions. Con todo, en la 11-12, siempre con Mou, se fue hasta los 54 partidos jugados (26 goles), pero la Copa de Europa seguía siendo esquiva. La apuesta del club por Benzema y la llegada de Bale le hicieron ver la conveniencia de acabar su etapa en el Madrid, tras 121 goles en 264 apariciones.
Italia: Gloria en Nápoles, frustración en Turín
Su siguiente destino fue Italia, donde el Madrid encontró una gran oferta (40 millones) por parte del Nápoles. Es posible que Higuaín viviera en San Paolo sus días más felices como futbolista. Marcó muchos goles, siendo artillero del equipo en las dos primeras temporadas y de todo el Calcio en la 15-16, con 36 dianas que acababan con el récord histórico de la Liga italiana, en manos del sueco Gunnar Nordhal (AC Milan) desde 1950. Ese registro le abrió las puertas de la Juventus, que pagó 90 millones de euros (tercer traspaso más caro en ese momento) en busca del gol que le faltaba para conquistar la Copa de Europa. De 'bianconero' anotó 32 dianas en su primer curso, 16-17, pero fue justamente el Madrid el que le dejó sin Champions en la final de Cardiff.
La llegada de Cristiano a Turín acabó con aventura en la Juve mucho antes de lo esperado. Buscó cesiones que no prosperaron en Milan y Chelsea (18-19), antes de regresar al Piamonte en la 19-20, que cerró con sólo 11 goles. Tras esa temporada, decide poner fin a su etapa en Europa y aceptar el reto del Inter de Miami, el equipo de David Beckham, en la MLS.
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Argentina, grandes amarguras
Con todo, es posiblemente su periplo en la selección argentina el que más momentos delicados ha dado a Higuaín, al que no se le perdona su error ante Neuer en la final de la Copa del Mundo de Brasil 2014, una ocasión nítida al plantarse solo ante el meta germano que marró con un golpeo mordido. Pudo resarcirse aún en el primer tiempo, pero su gol fue anulado por fuera de juego mientras el 'Pipita' lo daba todo en la celebración. Alemania acabó llevándose la final con gol de Mario Götze y dejó a Higuaín a las puertas de una gloria que con Argentina se le he negado varias veces, como en las dos finales de Copa América perdidas en 2015 y 2016, que también generaron críticas a su falta de finura en la definición. Quizá por eso, cuando dejó la Albiceleste en 2019, con 31 goles en 75 partidos, dejó el siguiente mensaje: "Para alegría de muchos, dejo la selección".