La diócesis de Ourense presentó ayer la memoria anual correspondiente a 2021, que desgrana su trabajo en sus múltiples ejes de actuación. Uno de los datos más relevantes lo ofrece el ámbito social y caritativo, ya que la acción de Cáritas registra números alarmantes. En el año 2021, la entidad atendió a 33.496 personas, un 52% más que en prepandemia. La cifra, por tanto, supera con mucho al dato de 2019, año anterior a la irrupción del covid, cuando los beneficiarios ascendieron a 22.077 personas.
Del total de personas atendidas en los 146 centros de la diócesis ourensana, destacan las 14.150 del centro para la defensa de la vida y de la familia y las 13.601 de los centros para mitigar la pobreza. Al mismo tiempo, sube el número de personas que prestan su tiempo a ayudar a los demás: mientras en 2019 eran 383 los voluntarios, en 2021 ascendieron a 407. A la vez, la diócesis recolectó algo más de 108.000 euros para la ONG Manos Unidas, que lleva a cabo proyectos de desarrollo en los países más necesitados.
Las cuentas
En cuanto a la faceta económica, la Iglesia ourensana ingresó y gastó cantidades prácticamente iguales, que superan por poco los 14,767 millones de euros. Las aportaciones de los fieles juegan un papel muy relevante en el sostenimiento económico de la diócesis. Los feligreses sumaron prácticamente el 42% del presupuesto, un total de 6,2 millones de euros.
A la vez, la Asignación Tributaria supuso el 26,8% del dinero entrante en las arcas eclesiásticas, unos 3,96 millones, a pesar de que bajó ligeramente el número de declarantes de la renta que marcaron la “X” en la casilla de la Iglesia. La rellenaron 46.630 personas, 186 menos que en 2020.
En cuanto a gastos, las aportaciones pastorales y asistenciales supusieron el mayor desembolso, unos 6,5 millones de euros. Las retribuciones del clero (2,55 millones) y los gastos extraordinarios (2,54 millones) son las siguientes partidas de mayor entidad.
La catedral pierde visitas
Dentro de las actividades de la diócesis en el ámbito cultural, es reseñable el descenso de visitas a la catedral de la ciudad. Si en 2019 fueron 43.488 los interesados en adentrarse en el histórico templo, en 2021 se redujo casi a la mitad, con solo 24.280 visitantes. Aun así, la cifra es más del doble que los 10.678 turistas que conocieron el inmueble en 2020, año de la pandemia. De cada diez personas que atrae la catedral, nueve son de origen nacional.
Por las restricciones contra el covid, se trató de reducir la presencia de investigadores en el archivo histórico diocesano, y en su lugar se aumentó la atención por vía telemática.
Asimismo, en el marco de las actuaciones de construcción y rehabilitación del patrimonio, la diócesis ejecutó 18 obras de entidad en templos y casas rectorales, tal y como contabiliza la memoria. Además, se llevaron a cabo 5 intervenciones en imágenes y retablos.