El Real Madrid empezó la temporada como acabó la pasada, con victoria y exhibición de poderío esta vez ante un Coosur Real Betis que compitió con el vigente campeón de Liga hasta el inicio del tercer cuarto (42-46, min 24), pero claudicó ante la tremenda pegada de los blancos, que con un parcial de 2-18 encarrilaron el triunfo (69-100) y disputarán este domingo (18.30, h #Vamos) la final en busca de su quinta Supercopa consecutiva.
Tavares presiona a Bertans / EFE
Pese a las bajas de Williams-Goss, Abalde y Alocén, los blancos demostraron que han mejorado si cabe su plantilla de la pasada temporada. Deck (17+6) y Yabusele (13+9) se mostraron imparables y Musa (21+4+7), que salió desde el banquillo, se postuló como su máxima amenaza ofensiva y como un generador de juego de primerísimo nivel. Fichajón de los blancos. Chus Mateo, que debutaba en competición oficial, debe frotarse las manos con esta superplantilla que les obliga un año más a competir por todos los títulos.
El Coosur Betis aguanta el tirón blanco
El Coosur Betis aguantó las embestidas de los madridistas gracias a su acierto desde el triple, con Shannon Evans (12 y 4/6 t3) y BJ Johnson (14). Pero las pérdidas de balón, su inferioridad en el rebote y el lastre involuntario en los tiros libres (no lanzó ni uno en la primera mitad) pesaron demasiado en un equipo que se vino abajo tras el descanso cuando su estrella, Shannon Evans, se tuvo que ir al banquillo con cuatro faltas. Sólo entonces llegó el aluvión de los blancos, que anotaron 8/13 triples en la segunda parte tras haber penado en la primera (2/12).
Sergio Rodríguez intenta superar la defensa de Dairis Bertans / EFE
El Coosur Betis llevó la iniciativa en los primeros minutos pese a la buena defensa de Causeur a Evans (10-7), gracias a su acierto exterior (5/8 triples en el primer cuarto). Yabusele y Deck, dos máquinas de producir, lideraron la reacción del Real Madrid, que voló con la salida de Sergio Rodríguez (Hanga salió de base titular pero se retiró tocado) y sobre todo de Dzanan Musa, otro jugador incontenible en ataque (16-23, min 8).
Deck se dispone a anotar una bandeja sin oposición de ningún bético / ACB PHOTO
Tsalnpouris y BJ Jonson, con un triple sobre la bocina, mantuvieron en liza a los sevillanos (21-25, min 10). No fue fácil, porque los blancos acapararon el rebote y corrieron para ampliar la renta con el Chacho a los mandos y Yabusele y Deck desbocados (30-4, min 20). Los béticos hicieron la goma con dos triples de Evans (35-42). Estaban en el partido pese a su manifiesta inferioridad en el rebote (16-24) y a su desventaja en los tiros libres: ningún tiro libre lanzado por 10/12 de un Madrid desacertado desde el triple (2/12).
Parcial de 2-18 en cinco minutos y sentencia
En la reanudación Gerun y Evans, con su cuarto triple (4/5), parecieron meter a su equipo en el partido de nuevo (42-46, min 24). Nada más lejos de la realidad, porque el imparable Deck y Tavares reactivaron a los suyos y los blancos volaron con dos triples de Llull y cinco puntos de Musa. El parcial de 2-18 en apenas cinco minutos fue mortal de necesidad para los sevillanos (44-64, min 29), que además debían sentar a Evans, su estilete ofensivo, con cuatro faltas personales.
Yabusele 'levita' para intentar salvar un balón imposible / ACB PHOTO
En el último cuarto ya no hubo partido. Los béticos bajaron los brazos y llegaron a perder por 33 puntos (67-100, min 37) y los madridistas dieron la alternativa a Cornelie (4), otro de sus fichajes. NI él ni otro de sus recién llegados, Hezonja (7), despuntaron ante los sevillanos. Sí dejó pistas de su clase Sergio Rodríguez (5+3+3), que sigue viendo el baloncesto como pocos.