Un largo proceso concluye con la aprobación municipal de la expropiación para poder abrir el vial
Después de años de procedimientos y gestiones por parte del alcalde de A Guarda, Antonio Lomba, el pleno del ayuntamiento aprobó, por unanimidad, el pasado viernes día 30 de septiembre, la propuesta de la alcaldía de expropiar y solicitar la urgente ocupación de la propiedad privada que se encuentra entre la calle Baixo Muro y la calle Ireira, con el objetivo de adquirir los terrenos afectados por la Modificación Puntual número 5 del Plan General de Ordenación Municpal, aprobada definitivamente en mayo de 2021, para ejecutar la obra de “urbanización de la prolongación de la calle Baixo Muro y su conexión con la calle Ireira”. Es un paso histórico para A Guarda, como una demanda que no acababa de resolverse.
La apertura de la calle ya cuenta con financiación a través del Plan Concellos de la Diputación de Pontevedra 2022-23 así como con el informe favorable de Patrimonio. Para empezar las obras únicamente será necesario que el Consello de Gobierno de la Xunta apruebe la declaración de urgente ocupación que se solicita desde el ayuntamiento de A Guarda.
El terreno a expropiar es de 131,7 metros cuadrados y no afecta a la vivienda con fachada a la calle Ireira. Abarca una pequeña finca, el patio del inmueble y las edificaciones auxiliares dedicadas a almacenes. La propiedad es en un 66 por ciento privada y en un 33 por ciento de titularidad de la Xunta de Galicia, que se hizo con parte de la propiedad al culminar un procedimiento de abintestato promovido por el alcalde en 2016 con la intención de poder negociar su traspaso o compra por el Ayuntamiento, negociación de la que la Administración autonómica finalmente nunca quiso saber.
