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Viviendas de la comarca balkense escapan a la gestión del agua

El Ayuntamiento exige que se instalen contadores en el exterior de las viviendas en localidades de mucho tráfico

Todos los vecinos de Valdeorras de O Barco debe tener medidores de agua instalados en sus hogares. Esta demanda la enfatizó ayer el alcalde Alfredo García Rodríguez en una reunión con pobladores rurales que buscaban explorar posibles problemas de oferta habitacional por la sequía, no logro conectar con la que obtuve. "El tema del contador es fundamental. Algunos vecinos todavía no tienen medidor y eso es inaceptable. Si no tienen contador, no pagan la cuota inicial. Sí o sí, necesitamos un contador", advirtió el concejales

Todos los hogares están obligados a disponer de contadores de agua en los municipios en los que únicamente los núcleos urbanos de O Barco y el centro de Viloira están conectados a la red de abastecimiento municipal. El resto de los pueblos tienen sus propios mercados, los cuales son tomados por sus vecinos. No obstante, el ayuntamiento suele ser responsable de la reparación de averías en las tuberías o de los trabajos de reparación. Así, en las últimas semanas se han construido pozos de barrena en las localidades de Millarouso y Raxoá, también ha habido actividad en Vilariño, Soulecín o Vilanova, también se ha renovado la red de oleoductos de Santigoso y se prevén mejoras en Santa Mariaña.

Esta serie de visitas fue iniciada por el alcalde para evitar posibles problemas con los servicios de entrega durante la sequía. Al mismo tiempo, se analizan posibles averías y se reparten bandas beneficiosas, asegurando que el contador funcione y que se saque fuera de casa para controlar el consumo y que no se utilice para otro fin que no sea el doméstico. “Están buscando fallas, se han encontrado muchas y el consumo está acotado”, dijo Alfredo García.

No. "A este ritmo, los dos meses restantes estarán bien. Ahora mismo hay poca agua en el río, pero comenzará a aumentar a partir de septiembre".