Spain
This article was added by the user . TheWorldNews is not responsible for the content of the platform.

ERR input text too short

Las agencias gubernamentales, las tiendas, los hoteles y los supermercados se preparan para las medidas que deben comenzar mañana con muchas preguntas

Conservación de energía del gobierno El plan entrará en vigor el próximo miércoles como el plazo para que tanto el sector público como el privado adopten las medidas necesarias para su cumplimiento. En Vigo, la legislación estatal sigue planteando muchos interrogantes, especialmente en actividades de alto impacto como la hostelería.

Desde que entró en vigor este plan energético, una de las principales obligaciones a cumplir es mantener el aire acondicionado a una temperatura máxima de 27 grados. Afecta a todos los edificios públicos, grandes superficies, zonas comunes de hoteles, establecimientos de restauración y comerciales, a excepción de los centros de formación, hospitales, centros de estética, gimnasios, etc. 

En el sector hotelero, las habitaciones de huéspedes están exentas de esta regulación. Sin embargo, el presidente de Ahosvi, Jaime Pereira, señaló que "sugerimos a nuestros clientes que asuman la mayor responsabilidad posible en este sentido". También advirtió: "Los vestíbulos de los hoteles tienden a estar llenos de aire, lo que dificulta el control de la temperatura". Pese a su renuncia por la nueva normativa, Pereira señaló que el hotel ya había tomado medidas de ahorro energético porque "los costos eran muy altos".

Los centros de conferencias y los grandes centros comerciales también deben cumplir con esta regla. En este sentido, Iñaki Teixeira, gerente del Auditorio Mar de Vigo, destaca que ajustando el termostato del edificio a 27 grados, "se puede adaptar sin problemas". “Si hay que esforzarse, esforzarse.” En el mismo memorándum, Angélica Falagán, gerente del centro comercial Travesía, señala que “hagan lo que dice el gobierno como anuncia en el BOE”.

Es esa resignación la que campa a sus anchas entre los dueños de negocios que tienen que encender el aire acondicionado e informar mañana. Sobre todo en el sector de la hostelería. “Es una pena que no haya consenso con la industria”, explicó César Sánchez Ballesteros, presidente de Feprohos (Federación Regional de Hostelería). Ribera ya ha dejado claro que en estos casos hay flexibilidad y prima la legislación laboral. Además, los representantes de los hoteleros criticaron que "solo se hable de temperatura y aire acondicionado", dando a entender que hay "un sinfín" de dispositivos en el campo que podrían explorarse para establecer formas de regular el consumo y los descuentos. Para “empresas que buscan reducir el consumo de energía de sus instalaciones”.

Ballesteros dijo que las nuevas regulaciones eran "ridículas", diciendo, por ejemplo, que "si hubiera subsidios para comprar paneles solares para evitar la dependencia del gas natural", el consumo se reduciría en un 7 %.% señala que reducirlo sería más fácil. También aclara que se trata de una "norma general" que no tiene en cuenta las diferencias entre ciudades, ya que "no es lo mismo tomar un café o ir a un restaurante en Vigo que en Sevilla".

"Desde un punto de vista legal, hay muchas lagunas".

 "Necesitamos ver quién es responsable de hacer cumplir estas normas". Sí, dice César. Sánchez Ballesteros, presidente de la Asociación de Empresarios Locales de la Industria de la Hostelería, dijo: En este sentido, señaló que el estatuto "deja una serie de vacíos desde el punto de vista legal" y que si se incumple y se sanciona "cualquier hotelero puede hacer un caso favorable". regla, es posible que ya estemos trabajando desde el sector.

Otra contradicción que Ballesteros atribuye a la falta de planificación y diálogo con los diversos actores sociales es la obligación de implementar mecanismos de cierre automático de puertas en las instalaciones con aire acondicionado. “Estoy muy sorprendido de que esto se mencione porque el nuevo coronavirus todavía existe”, dice. "Ahora ya no tenemos que ventilar las instalaciones. Eso nos parece contradictorio. Es una forma de improvisar la legislación". La tienda apagará el aire si

El comerciante también expresa preocupación por el orden que debe adoptar a partir de mañana. Las tiendas se adaptan como pueden, pero la Federación Empresarial de Pontevedra ha dejado claro que, como explica su presidente, Iván Iglesias, "hace lo que la ley obliga a los 27 grados". 

De esta forma, aprovechan al máximo la ventilación natural y evitan encender el aire acondicionado. “Si la temperatura exterior es inferior a 27 grados, abra la puerta para que no entre el aire. 

Otra forma de combatir el calor sin encender el aire acondicionado es un ventilador tradicional. Los empresarios lo excluyen. "Como regla general, no, uso aire acondicionado cuando lo necesito". 

Pero el mayor inconveniente, dijo Iglesias, es que estas medidas de ahorro pueden afectar las ventas. "Entendemos y respetamos la ley y la posición del gobierno, pero está claro que nos afecta. Cuando la temperatura llega a los 27 grados, es muy difícil probarse la ropa''.