La Generalitat rescindirá anticipadamente la concesión del Eix Transversal. El Govern pagará a Cedinsa 483 millones de euros para recuperar la gestión de la autovía C-25. La compañía ha mostrado su oposición a la operación y se da por hecho que recurrirá la decisión del Ejecutivo autonómico. Y es que, por más que el conseller Jaume Giró haya sacado pecho, la cancelación de la concesión no es una buena noticia para Cataluña. La imagen de la Generalitat sale tocada pues la maniobra deja en entredicho la seguridad jurídica, un elemento fundamental a la hora de captar inversiones para la comunidad.
Además, la torpeza de Giró le llevó a cometer este jueves un inesperado patinazo. El consejero de Economía convocó a la prensa para explicar los detalles de la operación. Sin embargo, se olvidó de los medios digitales. Un error de principiante impropio de un profesional con amplia experiencia en el ámbito de la comunicación.
