Los partidos independentistas vuelven a dar muestras de su división en el aniversario del referéndum ilegal del 1-O. Una muestra ha sido la crítica de la CUP hacia el líder de ERC, Oriol Junqueras, por tratar de apropiarse la autoría lo que la formación separatista considera un “hito histórico” pero que “no es de ningún partido”.
La portavoz de la CUP en el Parlament, Eulàlia Reguant, ha recalcado que el 1-O “es de toda la gente y de todas las organizaciones que lo hicieron posible”, horas después de que Junqueras destacara el, a su juicio, “papel indispensable” de su partido para hacer posible la consulta clandestina.
Sin partidismos
“Ya basta de hacer partidismo con el 1-O”, ha pedido Reguant, que para la ocasión se ha reunido con representantes de organizaciones afines de territorios con afanes independentistas como Escocia, Irlanda del Norte, Quebec y Córcega.
La dirigente cupaire tampoco ha perdido la ocasión para lanzar dardos contra la Generalitat por las disputas internas que han protagonizado en los últimos días, que ha calificado como “un espectáculo lamentable y vergonzoso”.
Lucha por el poder
Para Reguant, lo peor de este enfrentamiento es que no tiene un trasfondo ideológico o de enfoque estratégico sino que se trata de una “batalla por la hegemonía y por el poder en la Generalitat”.
“Ya basta de pelearse por el poder”, ha proclamado al término del citado encuentro.
