Este pequeño pueblo de Lugo, con unos 10 habitantes, es un refugio para los cientos de peregrinos que recorren cada día sus calles empedradas. Uno de los puntos clave. Todo un distrito dedicado al mimo del turista: comida tradicional, paroza y aire puro.
Situado a 160 kilómetros de Santiago y a 1.293 metros de altitud, el pueblo de O Cebreiro cuenta con tan solo una decena de habitantes, y en 2022 se esperan cientos de peregrinos cada día persona visitará La agricultura de subsistencia solía ser la norma, pero hoy todos en este pequeño pueblo gallego viven cerca del Camino. Llega LU-633. Los coches deben aparcarse al aire libre. Dos columpios presiden la entrada a un pueblo atravesado únicamente por tres calles empedradas en las que se oye hablar a la gente en inglés, alemán e italiano...
Si tenían suerte llegaban a este enclave en los años 70 y ahora llamado 'Universal Village', los tres caminantes sueltos definitivamente se convirtieron en un punto de transferencia ineludible.
Hay peregrinos que son impulsados por la espiritualidad. Algunos comienzan a caminar por el deporte, otros están tratando de encontrar formas de resolver problemas internos y hacer una diferencia en su ser. La etapa francesa, itinerarios jacobeos con mayor tradición histórica, las primeras paradas al entrar en la comunidad gallega son posadas, restaurantes, tiendas de comestibles, albergues, lavanderías y una modesta oficina de turismo. Digonster recibe. Las preguntas comunes, dijo, incluyen los horarios de los autobuses, dónde dormir, los mejores lugares para comer y la distancia a la farmacia o centro de salud más cercano.
"Esto se debe a las peculiaridades de la región", dice. La farmacia está a 5 km, abre hasta las 20 h y cierra los domingos. Si necesitas algo fuera de ese horario, tendrás que alejarte otros 20 kilómetros. Además, la oficina no es una sala de emergencias las 24 horas. Un caminante sufrido, agotado, sudoroso y con muchas ganas de ducharse. Ella explica el camino y a qué puerta tocar. "Llevo aquí varios años. Vienen de particulares, grupos, familias con niños" Francisco Javier Castro Miramontes, "Fray Paco" es un compostelano, prerrománico Guardan la joya de Santa María, benditos peregrinos, e incluso actuar como socorristas en determinadas circunstancias.
Este franciscano, nacido en 1971, ha salido más de una vez a ayudar a las personas atrapadas en la nieve durante el invierno. "Bienvenidos a uno de los lugares más icónicos del Camino de Santiago. Más de mil años de historia nos contemplan. Es donde el Camino resurgió en el siglo XX, gracias a Elias Varigna de }
