Casimiro Balbuena, dirigente comunitario de Las Galeras, lee el documento entregado. fuente externa
La Universidad Autónoma de Santo Domingo (UASD) y otras 10 organizaciones rechazaron este miércoles la construcción de cinco plantas de gasoil y fuel oil en Las Galeras, de Samaná, tras asegurar que sus emisiones de gases contaminarán la atmósfera con el consiguiente impacto negativo a la salud, la biodiversidad, la calidad del ambiente y al turismo.
En una rueda de prensa, encabezada por Luis Carvajal, coordinador de la Comisión Ambiental de la UASD, acusaron a la Empresa Generadora de Electricidad de Samaná (Luz y Fuerza) de presentar ante el Ministerio de Medio Ambiente un estudio de impacto ambiental con violaciones a las normas de evaluación ambiental.
Se quejaron de que esa empresa no realizó las consultas públicas obligatorias en esos casos.
El grupo de organizaciones reclamantes lo completan las juntas de vecinos Unidos por un Bien Común de La Colmena, La Nueva Esperanza de Rincón y Los Tocones de Samaná.
También, la Asociación de Vendedores de Caño Frío y zonas aledañas, la Asociación de Vecinos de la Sangría y la Asociacion de Operadores de Embarcaciones Turísticas de Playa Rincón.
Igualmente, las iglesias católicas y evangélicas del Distrito Municipal de Las Galeras y el Foro Ambiental de Samaná.
Negocio con la salud
“La sociedad dominicana, el actual gobierno y el Ministro de Medio Ambiente deben detener esta afrenta social y ambiental, que es una forma de violencia ambiental de esta compañía contra Las Galeras”, significaron las organizaciones, durante el encuentro con los periodistas, en la UASD.
“La salud no se negocia” es la consigna que unifica a las comunidades del distrito municipal de Las Galeras, ante la intención de la empresa Generadora Eléctrica de Samaná (Luz y Fuerza) de instalar cinco plantas de energía a base de combustibles fósiles contaminantes, como lo son el diesel y el bunker C, en la comunidad conocida como La Colmena”, insistieron.
Indicaron que procuran el desarrollo de sus comunidades y no se oponen a la energía renovable, pero que si rechazan a la energía contaminante y a las intenciones de una empresa que pone en la balanza primero sus ganancias y luego el futuro de las personas y de la naturaleza.
Mintió al país
El grupo de organizaciones acusó a los promotores del proyecto de mentir sobre las características del mismo.
Precisó que la empresa aludida “originalmente anunció una planta que aportaría un 100% de energía limpia y renovable, cuando en realidad, ignorando a la comunidad, hasta en los procedimientos más básicos como las convocatorias a vistas públicas, ha interpuesto ante el Ministerio de Medio Ambiente un estudio de impacto ambiental para la obtención de la licencia de operaciones para plantas operadas con diésel y bunker C.
“Eso constituye un engaño que hace inadmisible dicho documento por parte de dicho Ministerio”, precisó.
Argumentan que hay una “clara violecióm a los procedimientos institucionales”.
