Yumiko Ramírez fue la protagonista de un episodio que quedó grabado por siempre en Internet: destruyó la casa en la que vivió con su familia, con tal de no 'darle el gusto' a la familia de su exesposo.
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Ocurrió en la ciudad de Chancay, Perú, y se trata de la demolición de una casa en la que Ramírez vivió junto a sus cuatro hijos y su esposo, Ricardo Vega, durante casi 20 años. El terreno pertenece al padre de Vega, y al poco tiempo de que Ramírez y Vega se casaron, empezaron a construir una casa en esta superficie.
El matrimonio colapsó luego de que Vega abandonara a su esposa con la finalidad de irse con otra mujer. Por esta razón el suegro, Pablo Honorato, decidió desalojar de su terreno a Ramírez y a sus nietos, alegando que “todos los días viene con uno y con otro y a los niños los deja abandonados a su suerte. No cumple con su rol de madre”.
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Ante la impotencia de no poder hacer nada, la ahora madre soltera, decidió contratar a unos obreros para que derribaran la casa y argumentó: “Me está pidiendo el terreno, pero no la edificación”.
Este suceso ha desatado cientos de opiniones en redes sociales, pero el comentario en el que más concuerdan los internautas es: “Nunca construir en casa de los suegros”.
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