El Valladares y el Racing Castrelos se llevan el premio por sus cien años de fútbol
La labor de un club de fútbol -o cualquier deporte- en un barrio o una parroquia es impagable. Toneladas de trabajo en la sombra para que la luz alumbre un lugar en el que los niños pueden formarse y madurar a través de los valores deportivos. A mayores, genera sentimiento de pertenencia en aficionados y deportistas. Orgullo de ser. Hacerlo durante un siglo entero ya son palabras mayores. Por eso, Valladares y Racing de Castrelos han sido reconocidos como vigueses distinguidos. Su centenario lo merece.
“Es un honor y un privilegio”, afirma con rotundidad Miguel Román, presidente del club de Castrelos. “Claro que hace ilusión porque empecé en el club cuando tenía 19 años”, rememora el mandatario, que ahora tiene 48. Su homólogo en Valladares, Doro Davila, destaca que se trata de “un premio á constancia” de tantas y tantas personas. “É o único xeito de cumplir 100 anos. Estamos encantados de representar o traballo de tanta xente”, añade.
Ambos tienen a sus primeros equipos en Preferente, pero su carácter de cantera es prominente. 320 niños y 18 equipos en Castrelos. “Hay mucho sacrificio”, destaca Miguel. Valladares tiene 300 fichas y 17 equipos. Allí, el aspecto femenino tiene gran preponderancia -70 licencias-. “Temos moi bo grupo de nenas. É o futuro”, proclama Doro. Que dure otros 100. Y los que vengan.
