El primer incidente ocurrió en el km 77.5 de la aldea El Remolino, Cuilapa, Santa Rosa, en donde agentes de la División de Investigación y Desactivación de Armas y Explosivos (DIDAE)- de la Policía Nacional Civil (PNC) localizaron una caravana de vehículos en la que iban migrantes de distintas nacionalidades
Explicaron que al hacerle el alto a los vehículos, los agentes de la PNC localizaron a 106 personas que ingresaron irregularmente al país y también se detuvo a otras 10.
En otro operativo, las autoridades ubicaron en la Cenma, en la capital guatemalteca, se localizaron 81 personas que se comprobó que eran migrantes que transitaban por el país de manera irregular.
El Instituto Guatemalteco de Migración realizó las identificaciones correspondientes y se determinó que son provenientes de Venezuela, Cuba, Haití, Senegal, Ghana y África, haciendo un total de 81 personas (51 hombres, 14 mujeres y 16 menores de edad).
Agregaron que se coordina la movilización de las personas identificadas para proceder con el protocolo correspondiente de atención al caso, según el Código de Migración.
Detienen caravanas de migrantes
Desde el pasado fin de semana las autoridades guatemaltecas han detenido dos caravanas de migranes que ingresaron al país irregularmente.
El domingo pasado las autoridades migratorias detuvieron una caravana de unos 600 migrantes que ingresaron irregularmente a Guatemala, en su mayoría de Venezuela.
La caravana estaba conformada por personas de Venezuela, Colombia, Haití y Honduras, ingresó a Guatemala por un paso fronterizo “no autorizado” y tras unas horas de diálogo regresaron a territorio hondureño, dijo a periodistas Alejandra Mena, vocera del Instituto Guatemalteco de Migración (IGM), según AFP.
El grupo fue retenido por policías cerca de Corinto, el mismo sitio donde el sábado uniformados detuvieron el paso a unos 400 migrantes sin papeles, principalmente venezolanos que buscan llegar a México y luego cruzar a Estados Unidos.
A esa marcha, las autoridades migratorias de Guatemala le autorizaron el paso a 155 personas, por razones humanitarias sobre todo a familias con menores y embarazadas.
