Los emprendedores siempre han sufrido durante los tiempos de crisis y esta no es la excepción. Desde que empezó la pandemia en 2020 muchos emprendedores han tenido que cerrar sus negocios, algunos de manera permanente. No obstante, los jóvenes emprendedores parecen dispuestos a apostar por negocios online, a pesar de la actual crisis económica que padece la mayoría de los países. Aun así, emprender nunca es fácil, sobre todo cuando la gente joven está bajo presión de la constante incertidumbre.
Falta de Recursos
Según las estadísticas, la falta de capital para emprender sigue siendo uno de los mayores problemas para jóvenes emprendedores. La estimación de los gastos operativos mensuales para poner en marcha un negocio depende del tiempo que estará operando el negocio sin que entre dinero por la puerta. Esto se conoce como «Meses hasta la primera venta» (Months to First Sale) y normalmente se necesita alrededor de seis meses para planificar e iniciar una pequeña empresa, pero realmente depende del tipo de industria al que pertenezca el negocio. Por ejemplo, los costes iniciales para un negocio de servicios a domicilio suelen ser sustancialmente menores que los de un negocio de fabricación, por ejemplo. Además, la forma de pago influirá en los gastos iniciales únicos. Por ejemplo, si necesita una furgoneta de reparto de $30 000, puede comprarla, lo que significa que necesitará esa cantidad en efectivo. También puede alquilar la camioneta, lo que significa pedir dinero prestado para pagar el vehículo y, por lo tanto, una cantidad inicial menor de efectivo para el depósito o el pago inicial del préstamo.
Problemas de planificación y gestión
Según muchos emprendedores exitosos, lo más importante a la hora de emprender es tener claro el proyecto y hacer un buen plan de negocios. Es importantísimo establecer objetivos y expectativas realistas y tener un plan alternativo, por si surge cualquier imprevisto. Otro error muy común es la incapacidad para elegir personal competente y deficientes sistemas para la toma de decisiones y solución de problemas. Es preferible que el emprendedor tenga alta capacidad de liderazgo y la claridad en definir los objetivos. De esta forma se evitan los malentendidos y gestiones poco profesionales desde el principio y se tiene clara la cadena de mando, lo que ayuda a cumplir con los objetivos propuestos.
Lidiar con el estrés
Teniendo en cuenta que a la hora de poner en marcha un negocio, hay mucho en juego, sobre todo si el emprendedor haya tenido que endeudarse para contar con un capital inicial, el factor que no hay que perder de vista es cómo lidiar con el estrés. Para que un negocio arranque pueden pasar muchos meses e incluso años, y durante este tiempo hay que trabajar muy duro sin obtener muchos beneficios, lo cual puede provocar sentimientos de frustración y angustia. Muchos empresarios dicen que sobre todo en los primeros años de su empresa no podían disfrutar de su tiempo libre porque el trabajo no se lo permitía. No obstante, por mucho que se trabaje uno siempre debe buscar la manera de relajarse de una forma o de otra, por tanto es muy importante contar con herramientas para aliviar el estrés. Para algunos, eso se consigue con las clases de yoga o ir a un concierto, para otros es disfrutar de sus juegos preferidos desde la comodidad de su casa. Hay sitios web muy seguros como, por ejemplo, máquinas tragaperras online por dinero real, sobre todo, si te gusta la tranquilidad, la privacidad y el método de “menos es más” para jugar a las tragaperras con dinero real.
Subestimar la competencia
Otro error muy común que suelen cometer los jóvenes emprendedores es subestimar la competencia. Esto sucede sobre todo por falta de experiencia y por pensar que nuestra idea es tan original que podemos pensar que tenemos menos competencia de la que realmente tenemos. Esto se puede evitar haciendo un exhaustivo análisis de la competencia. Aunque el producto o servicio que ofrezcamos sea diferente, lo verdaderamente importante es evaluar si esa empresa cubre las necesidades de nuestros clientes, y si la respuesta es que sí, son competencia y por tanto hay que tenerlo presente a la hora de hacer el análisis. Por ejemplo, hay que analizar lo que ofrecen, en qué somos diferentes, cuáles son sus precios, etc.
En conclusión, el reto de ser un emprendedor es una ardua tarea, y hay muchos detalles que tener en cuenta, pero aun así merece mucho la pena.
