En el estado Delta Amacuro está el delta del Orinoco. Uno de los recursos hídricos más importantes del país. Los indígenas waraos han aprovechado esta ventaja milenariamente de forma sostenible.
La pesca es una de las actividades económicas que más se pone en práctica en Delta Amacuro. Aunque a menor escala y siempre preservando los ecosistemas como milenariamente lo han hecho, los waraos destacan en este trabajo. Las faenas se llevan a cabo en el río o en el mar.
Entre la gran variedad de especies están los peces que más caracterizan a los deltanos: la guaraguara y el morocoto; ambos de agua dulce.
De acuerdo a los deltanos, son los más suculentos. Los mismos waraos sugieren sus distintas preparaciones.
El morocoto y la guaraguara son los peces que caracterizan a los deltanos. Al igual que en el estado Bolívar es la sapoara.
Mitos en torno a los pescados
Existe un mito que afirma que si te comes la cabeza de la guaraguara o el morocoto, terminas quedándote en el Delta para siempre.
Estos peces pueden encontrarse temprano en la mañana en varios puntos del centro de Tucupita, sobre todo en el mercado municipal. También en los puertos de Volcán, Macareo y parte del paseo Manamo.
El kilo de guaraguara vale entre 11 y 15 bolívares. Mientras que el de morocoto 30 a 40 bolívares. Estos precios varían y dependen del lugar y la temporada.
Los waraos sugieren prepararlo lo más natural posible. Aunque no se cierran a los gustos no indígenas que pasan por los aliños u otros condimentos.
Se puede comer a la brasa, sancochado o guisado. Ambos pueden acompañarse con la típica bola de plátano.
A la señora Luisa Quiroz, que vive en el centro de Tucupita, le gusta hornear el morocoto. Apenas lo prepara y entre sus entrañas pone cebollas y ajos. Al anochecer, está en su terraza degustando de este plato, que lo acompaña de un vino blanco.
Propiedades afrodisíacas
Los deltanos recomiendan el sancocho de guaraguara. Suelen decir que, «a la hija la negra la puso a parir morochos», luego de que ella y su esposo había intentado sin éxito concebir, incluso con tratamientos de fertilidad.
De acuerdo con aquellos con amplios conocimientos populares, la guaraguara posee propiedades afrodisíacas. Su consumo en sancochos sería lo más apropiado para este objetivo.
Ambas especies pueden encontrarse en cualquier época del año, aunque en verano abundan más las guaraguaras, mientras que en invierno, el morocoto.
