Ya no hay discusión. En varios hogares, los animales de compañía -perros y gatos- integran familias multiespecies. La toma de conciencia sobre sus necesidades significó un avance muy importante en la calidad de vida de las mascotas y adoptarlas implica rediseñar el presupuesto.
¿Cuánto cuesta mantener a una mascota en la Ciudad de Buenos Aires? Clarín hizo un relevamiento según el gasto promedio en alimentación, salud y entretenimiento que requieren mensualmente. La primera conclusión que surge es que el monto a desembolsar en el cuidado de los gatos es menos de la mitad que en el caso de los perros.
En un país donde la acumula el 88% en los últimos 12 meses es necesario considerar no solo el gasto fijo mensual, sino el aumento del costo a lo largo del año.
Cuánto cuesta por mes mantener un perro
En el caso de los perros, si se contempla el rubro principal, que es el alimento balanceado, hay que detenerse en el tamaño del perro, la marca que consume y la calidad. El balanceado para uno de tamaño mediano (calidad súper premium) cotiza en $ 10.000 (cerca de 10 kilos por mes) y para el pequeño $ 5.500 (5 kilos por mes). El precio de una bolsa de 10 kilos parte de $ 1.995 y va hasta los $ 10.000.
La consulta veterinaria ronda los $ 2.500 a lo que se le suma una desparasitación con pipeta por mes de $ 1.220. El pack de 10 bolsitas sanitarias sale $ 180, el baño y corte $ 2.400 (mediano) y $ 1.500 (pequeño) y el gasto mensual en accesorios ronda los $ 2.000.
Teniendo esto en mente, si a la cuenta básica se le suma un paseador que lo lleve durante casi 3 horas cinco veces por semana ($ 8.000) y snacks para cuidar la salud dental o solo premiar al animal ($ 1.440 el pack de 440 gramos), la cuenta trepa hasta un total de $ 27.740 (mediano) y $ 20.340 (pequeño).
El costo mensual de tener un gato
En el caso de los gatos, la ecuación en lo que respecta a la consulta veterinaria se mantiene en el mismo valor que la del perro ($ 2.500), la desparasitación con pipeta mensual es de $ 770, el alimento balanceado para un adulto (calidad súper premium) es de $ 6.200 (3 kilos por mes), las piedras sanitarias (bolsa de 3,6 kilos) $ 875 y los accesorios necesarios mensuales, $ 2.000. El total es de $ 12.345.
Familias multiespecies
Martita Costa (57) adoptó a Olivia (2), una bulldog, y a dos gatos callejeros, Minina y Chito. Pero hoy convive también con otros dos bulldog, Fiona y Greta, que le dejaron en custodia hasta que sus dueños puedan trasladarlos al exterior.
“Los gatitos no comen alimentos procesados. Tienen una dieta especial recetada por una veterinaria. Cuenta con todos los nutrientes: carne, trocitos de hígado, riñón y seso. Preparo cada alimento, lo coloco en bolsitas y los guardo en el freezer por 72 horas. Todos los días saco una para Chito y otra para Minina”, le cuenta a Clarín.
¿Y los perros? “Comen alimento balanceado especial para bulldog. A veces, lo alterno con comida saludable como pechuga de pollo con puré de calabaza o brócoli. También les doy arándanos, banana y manzana cortada”, ilustra.
Juan Bonforti (34) y Lorena Neira (40) son los padres de Francesca (6), una Sharpei, que adoptaron cuando tenía 45 días. “Es una raza especial que necesita cuidados especiales. Es ciega de un ojo lo cual implica una revisión trimestral para control de presión y un chequeo ocular mensual por un glaucoma. Cada consulta con el oftalmólogo cuesta entre $ 1.500 y $ 2.000”, relatan en diálogo con Clarín.
Francesca consume mensualmente una bolsa de 10 kilos de comida especial, a base de salmón, que vale alrededor de $ 14.000. ”Para economizar gastos, la paseamos nosotros 4 veces al día y también la bañamos”, señalan.
De acuerdo a la última Encuesta Anual de Hogares de 2018, conviven en los hogares de la Ciudad de Buenos Aires 475.000 perros y 295.000 gatos. Por lo que se estima que uno de cada dos hogares tiene mascota.
La agrupación Salva un Gato, que trabaja con el rescate de felinos en situación de calle y busca generar conciencia sobre la tenencia responsable, lleva 83 gatos rescatados en lo que va del año y concretó 72 adopciones.
“El gasto inicial que tenemos con un gatito de un chequeo de rutina y una castración es de $ 15.000. Pero, si necesita internación escala a $ 15.000 por día más los estudios que nunca son menos de $ 5.000 cada uno”, le dicen a Clarín desde la organización.
Obras sociales y prepagas
El modelo prepago también llegó a las mascotas. Por ejemplo, en Puppis cuentan con “Puppis One”, una obra social que ofrece planes con atención veterinaria durante las 24 horas, ambulancia, estudios complementarios y un club de beneficios. ¿Los costos? $ 1.765 Puppis y $ 2.415 Puppis One Plus.
“Nuestro objetivo es acompañar a cada familia con un esquema que le permita bajar los costos fijos asociados al cuidado de su mascota. Estamos trabajando en mejoras para que cada una pueda tener un Plan a su medida”, dice Damián Nogaró, cofundador de Puppis, la cadena de tiendas especializada de productos y servicios para mascotas.
“A primera vista, las obras sociales pueden significar una posible solución pero no cuentan con la misma cobertura que tienen las prepagas de los seres humanos quienes se pueden atender en lugares de alta complejidad y recurrir a un amplio listado de médicos veterinarios. Además, si bien implican menores costos, no cubren métodos complementarios como tomografía computada y resonancia eco-doppler rayos x. Las aconsejo solo si cuentan con un seguro de reintegro”, analiza Juan Enrique Romero, médico veterinario.
Decálogo del bienestar animal
A mediados de los años '60, Roger Brambell formuló “las cinco libertades” del bienestar animal: libre de hambre y desnutrición; de miedos y angustia; de incomodidades físicas o térmicas; de dolor o enfermedades y libre para poder expresar las pautas de comportamiento propias de su especie.
Nicolás Guido es docente de patología especial en la Universidad Nacional de La Plata. “La medicina veterinaria avanzó mucho en los últimos 10 años y se acercó bastante a la humana. La esperanza de vida aumenta si el animal vive dentro de un hogar y con la calidad de cuidados necesarios como la alimentación y un plan sanitario. Los propietarios son capaces de abordar todos estos gastos porque consideran que es parte de su familia. Por eso, la expectativa de vida del animal que vive en la calle sigue siendo baja”, le explica a Clarín.
La longevidad de los animales es variable y depende de la talla. “50 años atrás el promedio de vida de un perro era 12 años y 13 el de un gato. Pero hoy, un perro alcanza los 14 y el gato los 15”, señala Romero.
La esperanza de vida de los animales de compañía aumentó en los últimos años. ¿Por qué? Romero le dice a Clarín que se debe a tres factores: una dieta basada en alimentos balanceados o en consejos de nutricionistas veterinarios, gran cantidad de vacunas y mayor conciencia y cuidado de los animales de compañía que son seres vivos sintientes, sensibles y sufrientes. Para Nogaró la vida de las mascotas aumentó porque hoy existen mayores controles de salud y son accesibles.
De hecho, el último estudio publicado por parte de un grupo de investigadores estadounidenses, “Dog Aging Project” sostiene que “dado que los perros comparten el entorno humano y tienen un sistema de salud sofisticado, pero tienen una vida mucho más corta que las personas, ofrecen una oportunidad para identificar los factores genéticos, ambientales y de estilo de vida asociados con una vida saludable”.
Estudios preventivos
Los expertos consultados coinciden en que los estudios preventivos de las mascotas involucran los mismos chequeos que se realizan las personas. ¿De qué hablamos? Análisis periódicos de orina, de sangre, de materia fecal y, luego de cierta edad, estudios cardiológicos y ecografías. “Si los empezamos a implementar desde edades tempranas, podemos prevenir muchas enfermedades con tiempo o evitar llegar tarde al tratamiento”, advierte Nogaró.
“A partir de los 5 o 6 años del animal, se le recomienda hacer estudios sanguíneos y cardiológicos en forma anual. Además, desde los 3 meses en adelante, los animales deben participar de las vacunaciones preventivas todos los años y se debe mantener el control de parásitos internos y externos”, indica Romero.
¿Qué estudios clínicos hay que hacerles a las mascotas? Los expertos consultados indican que siempre dependerá de qué busquemos y de lo que necesite el animal. Señalan que se pueden hacer ecografías, electros, análisis de sangre, estudios parasitológicos, bacteriológicos, micológicos, radiografías, entre otros. “Para pedir algún estudio complementario uno apunta a lo que va viendo en el animal, si tiene alguna problemática puntual", completa Guido.
MG
