¡Otro sueño cumplido! Alondra visitó la Cueva y conoció a su jugador favorito

Alondra Martínez Oreas, la niña de nueve años aficionada al Deportivo Saprissa, visitó este miércoles el Estadio Ricardo Saprissa y conoció, entre otros, a su jugador favorito, el mediocampista David Guzmán, porque “es muy bueno y juega muy bien”.

La pequeña vecina de El Cocal de Puntarenas se hizo popular en redes sociales por un video en el que aparecía saltando y celebrando con euforia durante el partido de Guadalupe contra Saprissa el pasado 2 de octubre.

Los saltos, aplausos y alegría de Alondra llamaron la atención de cientos de aficionados saprissistas, entre ellos el presidente del equipo, Juan Carlos Rojas, que compartió el video en sus redes sociales. Internautas halagaron la capacidad de asombro de la pequeña.

Finalmente, como premio por su sana afición al fútbol, la puntarenense fue invitada por Saprissa a un entrenamiento del equipo y a otro partido. Este miércoles, Alondra visitó la Cueva junto con su familia. “Es un sueño, sí, estoy muy feliz”, dijo Alondra a La Nación el martes, entre risas de felicidad y algo de nerviosismo.

El equipo corrió con los gastos de movilizar a la familia hasta el Ricardo Saprissa.

Alondra, la niña puntarenense que cumplió su sueño de ver jugar al Saprissa

La aficionada morada se llevó fotografías con el defensor Kendall Waston, los mediocampistas David Guzmán y Mariano Torres, y el delantero Ariel Rodríguez, junto con su madre, su padre y su hermana.

La madre de la niña, Rosaura Oreas, dijo el martes a La Nación que su hija tenía años de querer ir a un partido de Saprissa, ya que desde pequeña es aficionada al equipo de Tibás, pasión que le inculcó su papá.

No obstante, como la familia es vecina de El Cocal de Puntarenas, la lejanía era una gran limitante para cumplir el sueño de la menor. Sin embargo, como reconocimiento al gran desempeño académico de Alondra, la familia Martínez Oreas hizo un esfuerzo, ahorró dinero y le cumplió a la pequeña su primer sueño: ver jugar al Monstruo.

Según contó doña Rosaura, Alondra tiene trastorno de déficit de atención e hiperactividad (TDAH), y depresión, por lo que, como padres, intentan premiar cada uno de sus logros.

“Para ella, fue una sorpresa. Ese mismo día le compramos una camisa porque no tenía y ella quería su camisa de Saprissa, fue algo impresionante para ella”, contó su mamá.