A eso de las 08:00 horas de este viernes, un grupo de tres werken, en representación de ocho lonkos de zonas de mayor conflictividad de la provincia de Arauco, región del Biobío, llegaron hasta el palacio de La Moneda para entregar un mensaje a la vicepresidenta Izkia Siches.
Según consagra La Tercera, en dicho encuentro, los representantes le plantearon la disposición de las autoridades ancestrales del pueblo mapuche para avanzar hacia un diálogo y trabajar por un Parlamento con el Gobierno del Presidente Boric que se traduzca en una restitución territorial.
"Somos el Consejo de Lonko del territorio de Arauco, catalogado hoy como el centro neurálgico del 'conflicto mapuche'. Representamos a diversos territorios y comunidades mapuche, que están en procesos de reconstrucción cultural y recuperación territorial", consagra la carta entregada a Siches.
El documento se trata de una invitación solemne dirigida al Presidente de la República, Gabriel Boric, a la ministra Siches, la titular de Defensa, Maya Fernández y de Desarrollo Social, Jeanette Vega.
"El objetivo de reunirnos solemnemente en un diálogo de las más alta resolutividad y compromiso: un nuevo Parlamento", expresa el escrito.
En la instancia, abordaron la disposición de los lonkos en avanzar en el diálogo sobre la restitución de territorios de las comunidades. Además, plantearon su "dolor y descontento" por las muertes en el territorio, recordando a Eloy Alarcón Manquepán, Segundo Catril y Yordan Llempi señalando la necesidad de llegar a "parlamentar sin armas".
"El Gobierno lee este mensaje que nos entregan los werken con la mayor disposición al diálogo. Creemos que este camino puede contribuir a uno de los avances más significativos en décadas sobre el conflicto en el sur", manifestó Siches tras la reunión.
"El Estado de Chile tiene la determinación y decisión de parlamentar con las autoridades ancestrales y tradicionales del pueblo mapuche: los lonkos y con ellos construir el camino", complementó.
El Plan Buen vivir, impulsado por el Ejecutivo, considera la restitución de tierras duplicando el presupuesto y mejorando los mecanismos de la Corporación Nacional de Desarrollo Indígena (Conadi) para la compra de predios, además del impulso del Ministerio de Asuntos Indígenas para robustecer la institucionalidad.
Para avanzar hacia esa dirección, se han realizado diversas conversaciones preparatorias entre los equipos de las delegaciones presidenciales, Conadi y el Ministerio de Desarrollo Social con actores y comunidades del pueblo mapuche.
Para su correcta realización, el Gobierno solicitó el acompañamiento de Naciones Unidas para facilitar el diálogo entre ambas partes; gestiones que ya se encuentran en curso.
En ese sentido, ya hubo una reunión entre la delegación de la ONU y la ministras Siches y Urrejola. Instancia donde se traspasó información sobre el contexto y los antecedentes del conflicto histórico. A partir de aquí, Naciones Unidas ha entrevistado a diversos actores nacionales y locales, con la finalidad de determinar su propia mirada del conflicto.
